martes, 31 de diciembre de 2013

Frozen Ground (2013)



Con: John Cusack, Nicolas Cage, Vanessa Hudgens, Dean Norris, Gia Mantegna y gran elenco

Dirección: Scott Walker


No, muy elemental. Muy básica. Medio documentalona, incluso.

John Cusack no puede hacer de malo, no hay caso. Uno lo conoce como si fuese su hermano mayor, o un amigo del bar de esos con los que hasta se podría hablar de Cristina Kirchner sin terminar a las puteadas y distanciados para siempre. Es como Ben Stiller, como Michael Fox, como Tom Hanks. Son tipos más buenos que Laura Ingalls en misa, por más bien que le salga el papel, que debo reconocer que no está mal, siempre será John Cusack. Y eso no hay forma de revertirlo.

Quizás deberían haberle dado el rol de Cage a él y poner un buen malo en su papel. Bardem hubiera ido genial. Fiennes tiene cara de depravadito, Abal Medina es otra opción interesante. Qué sé yo, alguno de esos que dan a malo, a “todo bien pero soy un desquiciado social que mata gente para metérsela en el orto” ¿A Cusack justo le fueron a pedir? ¿No tenían a otro?

Igual hay que verla, una vez que haya visto todo lo que hay dando vueltas llévese una copia, es llevadera y uno termina enganchándose con la historia, sobre todo para saber en qué termina ya que está basada en hechos reales.

Así que ya lo sabe, no busque en Frozen Ground la película de suspenso, intriga e impacto del lustro, pero es bueno conocer estos episodios que ocurren en el mundo con final justo.


Le pongo 4 Juanpablos.

lunes, 30 de diciembre de 2013

Stranded (2013)




Con: Christian Slater, Brendan Fehr, Amy Matysio y Michael Therriault

Dirección: Roger Christian


Resulta que en una luna de juguete sembrada de bases lunares de juguete y camioncitos de juguete, de pronto cae una lluvia de meteoritos de juguete que hace volar varias bases lunares de juguete y algunos camioncitos de juguete ante la cara de espanto de Christian Slater, capitán de este súper malísimo film que tiene estos patéticos efectos especiales que serían la envidia del creador del Capitán Escarlata y entonces, ante la necesidad de tomar una determinación frente a la continua llovizna de meteoritos de juguete que comienzan a destruir las bases de juguete, Slater ordena a su “soldador” que vaya de inmediato a sellar el compartimento del juguete 4 pero el soldador, justo cuando se disponía a acatar la orden es alcanzado por una piedrita que le raspa apenitas la frente, por lo que no pude hacer el trabajo y es reemplazado por la joven del grupo, quien intenta reparar los daños en la base de juguete 4 sin conseguirlo.

Entonces, derrotada, vuelve. Y Slater le dice “Buen trabajo” (¿?) y ella le dice “Usted también” (¿? por 2) y le ordena que se vaya a bañar ya que puede portar una espora venenosa y matarlos a todos, así que la muchacha va a bañarse y los muchachos se quedan espiando por la cerradura, no mentira, se van a hacer un estudio de los daños y descubren con pavor que se soltó un montón de CO en la base de juguete y que si no lo controlan de inmediato morirán diciendo pelotudeces, aún muchas más de las que ya de por sí están diciendo en estado normal.

Preocupación. Terror. Inquietud. Caras de circunstancia. Juguetes rotos.

Luego, en el laboratorio, el doctor del equipo secciona al medio un meteorito de esos que destruyeron las bases y los camioncitos de juguete y descubre con pavor que dentro hay como una mermelada de pera o algo así, que se mueve y agranda, por lo que ordena a la muchacha (que ya está claro que es quien recibirá órdenes durante toda la película), que haga un chequeo para ver si descubre algo. La muchacha pone con una pipeta un poco de mermelada de pera en un tubo de ensayo y lo mete en un centrifugador, pero luego, al abrir el equipo, tontamente se corta un dedo con el tubo de ensayo roto que había dentro presagiando una obvia contaminación o contagio de algo que veremos en breve.

Entonces, como bien todos supusimos, al día siguiente la muchacha siente náuseas y de pronto está embarazada de 6 o 7 meses. Slater señala al soldador y le espeta: “¡No habrás sido tú, maldito!”, a lo que tanto el soldador como nosotros, los espectadores, exclamaremos: “¡Ay, por favor! ¿y ya así de embarazada la voy a dejar? Que tengo esperma de criptonita, tengo?”, así que la ponen en cuarentena, la muchacha se embaraza aún más y pare, presa de los más estentóreos alaridos, una criatura equis que no nos es revelada.

Horror. Desazón. Búsqueda del curioso retoño no revelado.

Más tarde, por la noche, la muchacha descansa luego de haber dado a luz aquel retoño aun no revelado y despierta incómoda sintiendo como si alguien le estuviese chupando bien las tetas. Y en efecto, cuando mira sus senos no puede dar crédito lo que sus ojos ven: un peladito horroroso le está meta chupar una goma con desparpajo y cuando ella grita de horror, éste abre una boca como de langosta y huye despavorido. La muchacha, enfurecida e indignada, comienza a revolear estanterías, remedios, botiquines y aparadorcitos de esos que venden en el Easy para colgar escobas buscando al petiso sobapecho, por lo que de inmediato es anulada por sus compañeros que no entienden qué le dio a la pobre que está tan alterada. Y mientras Slater y el médico intentan sin éxito atarla a un camastro, el soldador es mordido en la pantorrilla por el peladito sobapecho, que luego lo mira con sarcasmo, riéndose socarronemente y huye por un pasillo.

Soldador comienza a los gritos, avisando a sus compañeros lo que le ocurrió con lujo de detalles: les cuenta que un extraño peladito todo baboso y de color blanquecino le mordió la gamba y se escapó por el pasillo no sin antes tomarse del marco de la puerta y reírse con sarcasmo, pero el médico desestima esta versión y le dice que seguro se debe haber cortado con un vidrio, a lo que la muchacha exclama: “¡Háganle caso al tipo, yo vi con mis propios ojos como ese mismo peladito que él vio me chupaba bien las tetas!”, pero el médico, como todo facultativo de película clase Z, hace oídos sordos de lo que manifiesta la muchacha y le dice que no, que no paso eso y que nadie le chupó las tetas, que ella lo que tuvo fue una alucinación, y que el soldador se cortó con un vidrio (¿?)  

Más tarde, Médico revisa el corte en la pierna de Soldador, quien claramente tiene una tremebunda mordida con forma de mordida en la pantorrilla, pero le dice “te has hecho un corte profundo con ese vidrio” (¡Ay, por favor! ¡¡Ya te dijeron mil veces que lo mordió un pelado, imbécil del poto!!), insistiendo hasta la boludez más plena con su boba teoría de pavote necio y le pide a Soldador, sin siquiera curarlo, que descanse.

Mientras tanto, en la pieza de Soldador, Peladito Sobapecho comienza un proceso de crecimiento inusitado que lo pone en una asquerosa situación todo untado de mermelada de pera y en bolas aunque con un calzoncillito que claramente se nota entre los pliegues de pegote, y crece y crece y nada lo detiene, se forma y aumenta y llama a otras miles de manos con fuerza y con coraje, siempre hacia delante y crece hasta que se transforma en un Soldador nuevito e igual a nuestro protagonista. Y va y lo enfrenta, para asustarlo. Soldador se asusta y grita unos gritos que son escuchados por Médico, que lo va a ver y le dice: “Es suficiente, en este mismo momento dejarás la bebida y te pondrás a correr en la cinta para exudar todo el alcohol que tienes en la sangre, y luego te haré un estudio para determinar cuán loco estás” (¿?) (puedo seguir por los siglos de los siglos poniendo signos de confusión luego de cada necia aseveración de este médico incompetente, quizás debería dejar de citarlo, si es al pedo, usted ya sabe que el tipo es un imbécil).

Entonces, ya inmersos en la más absurda película mala que vi –puedo garantizar- en los últimos dos años, Marciano, caracterizado por Soldador y haciendo muy pero muy mal de Marciano, al punto en que uno duda si aquellos extraterrestres creados por Ed Wood en Plan 9 From Outter Space hayan sido los peores que hemos visto, comienza a hacer de las suyas haciéndose pasar por Soldador, quien se hunde más y más en el alcohol y comienza a creer que es la bebida quien le hace ver al Marciano con su cara corriendo a su lado en la cinta desnudo y con mermelada de pera en el cuerpo.

Y todo se va al carajo, finalmente Slater intenta encarcelar a la muchacha por orden de la compañía (¿?), la muchacha ofrece resistencia, Slater forcejea y recibe un bisturizazo en el abdomen. Médico lo cose, le da unos antibióticos y va a visitar a Soldador, que ya está muerto en su litera, todo cortajeado y hecho un revuelto gramajo de persona mientras Marciano va a visitar a Slater con intención de aniquilarlo, Slater forcejea, le da una piña y Marciano huye, justo cuando Médico vuelve de lo de Soldador y le pregunta a Slater qué ocurrió, pero para sorpresa de todos nosotros, cuando Slater le cuenta que fue Soldador quien intentó reducirlo, en lugar de decirle que seguro fue un vidrio u otra persona que justo pasaba por ahí como nos tenía acostumbrados desde que comenzó esta burrada, esta vez Médico toma instantánea y criteriosa conciencia y le dice que no, que no fue Soldador, que seguro es ese marciano que se engendró dentro del cuerpo de Muchacha hace solo unas horas, ¡y no solo eso!, comienza a describir con lujo de detalles todos los movimientos del marciano como si hiciera unos segundos no hubiese estado todo el tiempo aduciendo delirantes teorías sobre todo lo que ocurría a su alrededor y delante de sus tontas narices ¡en lugar de creer lo que le decían sus colegas!! ¡¡Dios!! ¡Quién escribió esto! ¡¿Abal Medina?!

Así es que entre los tres intentan reducir a Marciano sin conseguirlo. Médico muere hecho una explosión de carne picada al abrirse una compuerta hacia la intemperie lunar y Slater y la muchacha no consiguen llegar a tiempo al módulo eyectable que vuelve a la tierra mientras que Marciano sí lo hace y consigue llegar vivito y coleando a nuestro planeta con oscuros y temibles propósitos como ser: seguro que estos te filman una secuela.

Le pongo 2 Juanpablos, las escenas de los meteoritos de juguete no serán superadas jamás y merecen un Oscar a la torpeza universal.



viernes, 27 de diciembre de 2013

Amour (2012)






Con: Jean Louis Trintignat, Emmanuelle Riva, Isabelle Hupert y gran elenco

Dirección: Michael Haneke


Está bien. Buena película de Haneke pero guarda, guarda que es ese tipo de movies francesas de enfermedades siniestras que tanto les gusta filmar a nuestros amigos de remera a rayas, boina y bigotito fino, y a mí esas películas no me van ni en pedo, como la de las “Invasiones Bárbaras” o la de esos amigos que ya ni recuerdo el nombre que la película empieza con una reunión para un asado y uno de ellos se va a echar un meo y orina sangre que la saqué directamente ahí mismito y me puse a ver otra cosa. Son muy rompepelotas los franchutes con el tema de las enfermedades y la muerte.

Amour trata un tema difícil de la senilidad, pero lo hace de manera un poco más llevadera, no es tan morbosa y se puede ver.

Eso sí, si usted gusta del cine de acción, de minas en bolas o de extracciones selváticas a cargo de un equipo paramilitar pagado en las sombras por un gobierno que luego no admitirá que dio tal o cual orden, ésta no es la opción que está buscando. Raje a otra góndola y llévese otra cosa.

Amour puede ir bien si le agradan las películas de amor en serio sin pelotudeces melosas y se banca la realidad de que en algún momento usted llegará a ese estadío en la vida

Quien sabe es una buena opción para un finde. Ni se le ocurra alquilar esto un lunes, es demasiado bajón para encarar la semana.

Le pongo 7 Juanpablos. Isabelle Hupert sigue siendo muy linda a pesar de su edad.





jueves, 26 de diciembre de 2013

Deadfall (2013)






Con: Eric Bana, Olivia Wilde, Charlie Hunnam, Kris Kristofferson, Sissy Spacek, Tret Williams y gran elenco

Dirección: Stefan Ruzowitzky


Bien. Lo bueno de Eric Bana es que uno sabe que si se lleva una peli donde actúa él, no va a ser estafado.

Ojo, tampoco es la película del siglo ni mucho menos, pero está bien. Bana consigue llevarnos de la mano con comodidad mientras Olivia Wilde nos deja bobos como Patricio Estrella de solo verla.

Sissy Spacek está muy vieja. Eso significa que yo también. No puede ser que esa mujer sea aquella jovencita que se enojara tanto en la fiesta de fin de año de su colegio.

En Hunnam descubrieron un actor que demuestra ira contenida en sus labios apretados y le hacen hacer su gracia en cada película en donde lo veo actuar. Quizás deberían darle un rol donde no tuviese que aguantarse un rato largo de pegarle una piña a alguien, quizás podría hacer un papel de banquero o de cirujano plástico, qué sé yo. Me gustaría no volver a verlo en esa situación ya que sería muy reiterativo.

En fin, amigos, una buena película de asalto, muerte y coraje con buenos actores, buena resolución de trama y una Olivia Wilde que está para rechuparse los dedos.


Le pongo 6 Juanpablos y todo.

miércoles, 25 de diciembre de 2013

The Awakening (2011)




Con: Rebeca Hall, Dominic West, Imelda Staunton, Isaac Hempstead Wright, Shawn Dooley, Joseph Mawle y gran elenco

Dirección: Nick Murphy


Sí, qué sé yo. Póngale que zafa.

Pasa que da bronca que uno sabe de entrada más o menos a dónde apunta la trama, y las escenas van en escalera hacia el final de manera muy exacta.

Rebecca Hall está bien, pero la peli en sí es bastante sonsa, demasiado traída de montones de historias similares que conducen a finales ya vistos cientos de veces, así que le pongo solo 4 Juanpablos y lo dejo con la inquietud.

martes, 24 de diciembre de 2013

Ashes (2012)






Con: Jim Sturgess y Ray Winstone

Dirección: Mat Whitecross


No, más o menos. Sturgess y Winstone se pierden en la nebulosa de una historia que podría haber dejado algo bueno pero que está mal contada.

Ambos actúan bien sus roles. Winstone pela una buena actuación de enfermedad, da pena porque es un hombre que siempre ha mostrado lo que tenía desde roles de reparto y ésta era una oportunidad de florecer con un exquisito protagónico, pero la película en sí es una chotada desquiciante, mal hecha, mal rumbeada, mal editada, una pena por estos dos londinenses copados que donde actúan dejan buen recuerdo.


Así que le pongo 4 Juanpablos solo por las actuaciones de ambos, pero verlos remar así, en dulce de leche, da un poco de indignación. 

lunes, 23 de diciembre de 2013

Bullet To The Head (2012)






Con: Un primo mío, Sung Kang, Sarah Shashi, Adewale Akinnuoye-Agbaje, Jason Mamoa, Christian Slater e inmundo elenco

Dirección: Walter Hill


Resulta que mi primo, en esta nueva oportunidad y lejos de entender que ya fue, ya pasó, ya está y que es hora de recostarse en una tumbona a mirar culos en alguna paradisíaca playa a bordo de ese yate súper lujoso que se compró y en el cual aún no me ha invitado a pasear, en esta oportunidad se pone en la arrugada piel del temible Jimmy Bobo, un implacable y temerario asesino a sueldo a quien los años (67), los golpes que le propinara Ivan Drago en su momento más las corridas por la selva en el rol de Rambo sumado a las incontables cirugías estéticas que se propinara en el rostro, que hasta hace un tiempo atrás parecía congelado en una expresión monumental de pasmo ineludible y ahora con este último retoque pudo quitarla para obtener un rostro increíblemente recio que no puede modificar bajo ningún punto de vista pero que al menos le sirve para protagonizar esta nueva película, no le impiden pasearse por el film duro como paquete de pastillas ante la mirada cómplice de sus colaboradores, quienes no le dirán que camina como un muñeco y cobrarán su sueldo, a ver si el viejo Sly se arrepiente de terminar el filme.

Entonces, decía, la pasa de uva que una vez fue Rocky o Rambo ahora se encomienda, con su coequiper, un ignoto actor que muestra por todos lados que morirá inminentemente a silenciar a un aún muchísimo más ignoto actor que se pasa toda la presentación del filme tomando merca, chupando y bailando en calzoncillos mientras la prostituta que rentó se pega un baño antes de poder enfiestarla.

Así que Sly y NN estacionan el auto, se bajan, sacan del baúl las armas (exactamente igual que en Pulp Fiction pero sin un cuarto de onda) y suben al piso donde bailarete se enfiesta y se parapetan en la puerta (exactamente igual que en Pulp Fiction pero sin un cuarto de onda) para tomar aire o carrera e ingresar y acabarlo (darle un tiro, no esa asquerosidad que usted pensó, no sea pervertido).

Entonces golpean, entran, piña va, piña viene, lo matan. Sly debería ajusticiar también a la prostituta, pero ésta porta en su espalda un tatuaje de un puma que lo enternece, así que no la mata.

Error. Futuro arrepentimiento. Recurso utilizado unas cien mil veces.

Entonces aquel que debía pagarle el trabajo no lo hace y manda a un increíblemente mal actor que hace de malo a matarle y este se inmiscuye en el bar donde Sly degusta un whiskycito con su ignoto partner y cuando Sly se va a echar un cloro agarra y apuñala a ignoto actor para luego ir a por Sly, con quien se recagará a trompadas en el baño del bar y no conseguirá ultimarlo (a Dios gracias, de lo contrario hubiese terminado la película...).

Luego de esto, con una voz gruesa y cavernosa digna de un hombre de su edad, nuestro célebre primo nos cuenta un resumen de lo que fue su vida mostrando una seguidilla de fotos suyas desde que era un purrete hasta esta actualidad tan lamentable, con unos cartelitos de preso colgados del cuello mientras nos dice que fue capturado 26 veces, pero solo 2 lo condenaron, y las fotos que pone son claramente fotos que el director le pidió de distintas etapas de su vida, algunas muy atinadas para colgarle con Photoshop un cartel de preso, pero otras ni remotamente, entonces hay una que se está riendo y otra en donde está mirando con ternura hacia arriba, y nadie se ríe de esa manera cuando le sacan la foto para encarcelarlo ni mira con ternura hacia arriba. El director debería haber sido un poco más criterioso. O al menos nuestro primo debería haberlo sido, es un tipo que tiene montones de películas en la espalda…

Mientras tanto, en otro lugar de New Orleans, meca y cosmópolis de cada película malísima que sale luego del episodio con el huracán Katrina, un señor que directamente no debe ser actor, hace de jefe de los malos que porta una extraña enfermedad en las piernas que hacen que se mueva con lentitud y apoyado en sendos bastones, quizás para poder amplificar un poco su actitud de malo, tan irremediablemente imposible de extraer de esa cara de pelotudo que tiene, y recibe la mala noticia del mamón que debía silenciar al viejo Rocky de que esto no pudo concretarse pero que no se preocupe que en poco tiempo más lo acabará.

Al mismo tiempo, en el departamento de policía, un joven koreano llega desde Washington a tomar cartas en el asunto y debe encontrar al asesino que mató a bailarete a quien encuentra de inmediato gracias a su celular de última generación (esto es así, usted sígame la corriente. Imagino que es algo que quiso plasmar Sly como diciendo “los jóvenes de hoy encuentran todo con ese aparatito”) y en lugar de apresarlo se hacen amigos y salen en sociedad a: uno encontrar al rengo malo para encarcelarlo y el otro a matarlo.

Y así comienza esta torpe anécdota de Sylvester Stallone en donde, hay que admitirlo y quizás levantarse y aplaudirlo con vítores, nos muestra qué bien que se mantiene físicamente, qué lindas que les quedan las arrugas en sus torneados bíceps y qué imbéciles son todos aquellos que intentan doblegarlo a pesar de sus casi 70 año y su clarísima imposibilidad de moverse con la soltura de otrora, esa soltura que reparte como quien regala caramelos el mamón con quien se pelea en toda la película y que solo en la cabeza ilusa de nuestro querido primo podría haber perdido como pierde la pelea, en un mano a mano entre un viejo hecho mierda y un joven saludable y listo para enfrentar la vida.

Cuando Sly salió con “Los Indestructibles” y le dio ese toque cómico que puede gustarle o no, era una cosa, pero esto no. Así no, diría Mirtha Legrand de Tinayre.

Dejate de joder, Silvestre. Comprate un gato y anclá en Grecia, comprate una isla y ponete un PaintBall e invitá a tus amigotes a cagarse a tiros, déjate de joder que ya hincha las pelotas.

Y otra cosa: ¿podrías haber averiguado que significa Bobo en un país de habla hispana? ¿Bobo se tenía que llamar el personaje que encarnaste? ¡Me hubieses llamado! Sos muy bobo.


Le pongo 3 Juanpablos, la escena de las fotitos los vale. 

viernes, 20 de diciembre de 2013

The Human Centipede (First Secuence) (2009)






Con: Dieter Laser, Ashley C. Williams, Ashlynn Yennie, Akihiro Kitamura, el detective Kranz y el detective Voller, que es bastante mal actor.

Dirección: Tom Six


Hay que ser hijo de puta para hacer ésta película.

En realidad hay que ser un asqueroso para hacer ésta película.

O no, no es asqueroso, es pervertido. Hay que ser un pervertido para hacer esta película.

Aunque tampoco. Quien sabe "enfermo pervertido". O mejor: "Nazi enfermo y pervertido". Aunque Nazi y enfermo son sinónimos, así que no contaría.

Me parece entonces que lo mejor es “Nazi hijo de puta asqueroso y pervertido”, eso pinta de cuerpo entero al cerebro mágico que pergeñó esta asquerosidad pervertida, nazi e hija de mil putas.

Dieter Laser debería ir preso, no puede tener esa cara y no ser como se muestra en el film. O dénle un Oscar crónico o perenne, porque si el tipo lo que buscaba era que nos diera asco su presencia, lo recontra logró.

En fin, no sé qué más decirle al respecto, así que ya lo sabe: Si usted gusta del cine  asqueroso, pervertido, nazi e hijo de mil putas, alquílese una copia de este blu-ray, de lo contrario salga rajando de esta obra maestra de la perversión, la asquerosidad, la enfermedad nazi y la hijaputéz más plena que ha dado ésta década.


Le pongo 2 Juanpablos.

jueves, 19 de diciembre de 2013

Upside Down (2012)






Con: Jim Sturgess, Kirsten Dunst, Timothy Spall, Blu Mankuma y gran elenco

Dirección: Juan Solanas


Bien. Buena película del hijo de Pino. Quizás demasiado romántica. La historia daba para virar para otro lado, aunque no soy quién para andar opinando sobre de qué debería haberse tratado una película como esta. Solo me quedo pensando en lo bueno que hubiese estado si esto u lo otro, qué sé yo.

Sturgess está muy bien, al igual que Spall. Buenas colaboraciones de ambos. Dunst nunca me cayó del todo bien, deben ser esos labios finitos que tiene. Hay un refrán que reza: "Labios finitos, traición gruesa", aunque no lo sé, no puedo garantizar que esta muchacha sea traicionera. Lo único que sé es que no me gustan las minas con labios finitos. Y Kristen Dunst tiene labios finitos. Y quizás le dé placer traicionar a la gente.

Le pongo 6 Juanpablos a una película que si no hubiese sido tan romántica y encasillada hacia el segmento postadolescente se hubiera llevado un 8 seguro. 

miércoles, 18 de diciembre de 2013

Trolljegeren (2010)







Con: Otto Jespersen, Glenn Erland Tosterud (un actor muy testarudo), Johanna Mørck, Tomas Alf Larsen y unos trolls muy copados

Dirección: André Øvredal


A pesar de la terrible y ya a esta altura insoportable moda de hacer de cuenta que lo que uno está viendo “es real porque alguien encontró estos videos tirados en la puerta de una importante productora fílmica y no se pudo dar con el paradero de aquellos que aparecen en el film y nuestros científicos determinaron que las imágenes que veremos a continuación son irrefutables” y toda esa pelotudez que ya no resiste el más mínimo análisis, debo admitir que está muy bien hecha y que las partes en que aparecen los trolls son magníficas.

Muy buenos efectos especiales.

Así que ya lo sabe, si no soporta que lo agarren de boludo, haga como hice yo, adelante toda la parte en que intentan hacerle creer que todo eso es cierto y cuando ve que se están metiendo en el bosque ponga nuevamente play y disfrute de esos cuatro o cinco momentos muy pero muy bien logrados.

A eso le pongo 7 Juanpablos. A lo otro 1, así que podemos promediar un cuatrito pedorro que alcanza raspando para aprobar y así no irse a marzo.


Ojo, solo está en blu-ray, es una pena que no hayan traído al menos una copia en dvd.

martes, 17 de diciembre de 2013

Fortress (2012)






Con: Bug Hall, Donnie Jeffcoat, Sean McGowan, Chris Owen, Edward Finlay, Manu Intiraymi y unos aviones viejos hechos por computadora

Dirección: Mike Phillips


Cuando al minuto siete de haber comenzado el film lo único que vi con aburrimiento son un montón de aviones del año del pedo hechos por computadora que me hacían acordar al juego de Sacoa “1942” que jugaba como obsesionado cuando era niño, me levanté y la saqué. No valía la pena seguir adelante con una película que mostraba por todos los costados la precariedad de absolutamente todo lo que conlleva producir un film serio habiéndose encomendado pura y exclusivamente a que los avioncitos les salieran bien editados.

Así que ni siquiera sé de qué se trata. Es tan pero tan torpe que uno se da cuenta de inmediato y se va a hacer otra cosa más productiva.



lunes, 16 de diciembre de 2013

The Hangover III (2013)






Con: Bradley Cooper, Ed Helms, Zach Galifianakis, el pelotudo de Justin Bartha, Ken Jeong, ¿John Goodman?, Melissa McCarthy, Heather Graham, ¡ Jeffrey Tambor!, y gran elenco

Dirección: Todd Phillips



Resulta que en otro intento desfachatado por volver a recaudar dinero a troche y moche sin tener ni respeto por la historia original -tan original y divertida- ni por los espectadores que tan bien la pasaron en aquella primera historia original y divertida, los productores de esta forzadísima huevada insalvable nos cuentan ahora esta nueva secuela, ya montada en un cuete a la luna de la repetición obvia, el chiste elemental y el recurso básico en donde el desquiciado Alan, siempre inmerso en ese incierto mundo en el que vive, acaba de adquirir una jirafa y se la lleva muy jocoso a su casa, enganchando su tráiler al Mercedes descapotable que conduce mientras saluda a todo el mundo y por supuesto no toma ningún recaudo con el tema de las alturas por las que puede o no pasar con su jirafa, quien al poco tiempo es decapitada por un cartel que hace volar su cabeza hacia el auto que venía justo detrás, que en una osada cabriola termina construyendo un monumental accidente vial comprometiendo docenas de autos y camiones ante la mirada perdida de Alan, quien no solo no toma nota de lo que ocurrióle a su nueva mascota sino que encima niega con la cabeza como culpando a alguien que hubiese producido ese accidente que acaeció en su espejito retrovisor.

Esto hace enfadar muchísimo a su padre, el viejo Jeffrey Tambor, que pareciera que no le importara su discreto pasado como actor de reparto y lo regaña y le dice que no soporta más que siga viviendo en su casa sin trabajar teniendo como tiene 40 años mientras Alan, enojado, le espeta que tiene 42 y se pone los auriculares mientras Tambor va a la cocina a discutir con su esposa y muere de un infarto. Su esposa y la mucama intentan revivirlo mientras claman por la ayuda de Alan, pero éste se encuentra de espaldas con un chupetín escuchando música, y no tiene puta idea de lo que está pasando.

Luego, el entierro. Todos serios, tristes y adustos escuchando la dulce y aniñada voz que entona con melosa dulzura un tierno Ave María mientras la cámara enfoca a los parientes y amigos y por último al cantante, que no es otro que el propio Alan montado en una falta de respeto sin igual a su padre, su madre, sus amigos y nosotros, quienes no nos reiremos con el tonto gag. Y más tarde, a redoblar la apuesta en una certera cruzada por desafiar más y más las leyes de lógica y el buen gusto en la cruenta escalada hacia lo escatológico y el humor barato: Alan le aclara a los presentes que hubiese preferido que fuese su madre quien mueriera primero para culminar la escena quitándose el traje y cavando con sus propias manos la fosa donde su padre descansará finalmente en paz de un hijo que no le dio respiro ni a él ni a nosotros, que fue simpático en la primera oportunidad, que se quemó como una hoja seca en la secuela y que aquí, en esta tercera entrega, ya no hace reír ni al espectador más virgen del universo.

Pero no todo es Alan y sus trilladísimos aportes, aún resta saber qué fue de la vida del viejo, sucio y pervertido Chow, quien está cumpliendo condena en Bangkok y escapa del lugar como lo hiciere Tim Robbins en Shawshank Redemption para huir hacia México a seguir perturbando a quienes lo redoearen. 

Mientras tanto, la cámara vuelve a la vida de Alan, quien es esperado en su casa por su madre, su mucama y sus amigos Bradley Cooper y Ed Helms para convencerlo de que debe internarse en un psiquiátrico y así buscar esa madurez que le es tan esquiva, y cuando finalmente acepta subirse a la camioneta de su bello y rubio amigo, encaran un nuevo viaje juntos, esta vez hacia el hospital y ¿a que no saben lo que ocurre? Sí, adivinaron. Una camioneta los persigue, los topa desde atrás, se les pone a la par y los choca mientras Helms y Cooper, indignados y sorprendidos, putean sin más a sus perseguidores quienes consiguen sacarlos de la ruta, hacerlos bajar del vehículo y esposarlos mientras un muy de vuelta John Goodman se les acerca y les dice que hasta que no consigan ubicar a Chow, que le robó 21 millones de dólares, se llevará secuestrado a Bartha, a quien le recomendamos no vuelva a juntarse nunca más con estos tres amigos, ya que en cada una de esas ocasiones termina secuestrado o impedido o encerrado durante todo el film, sobre todo para que pueda mostrar de una vez por todas sus aptitudes actorales, y más que nada para que no florezca una cuarta entrega de esta estupidez que tanta gracia causó y que tanto enojo produce por estos tiempos en quienes pretendemos ver un atisbo de inteligencia o de novedad salido de las fauces hollywoodianas que tanto dinero recaudan de nosotros y que en lugar de invertirlo como se debiera prefieren seguir dándonos de comer mierda de mono que con tanto gusto suponen que comemos.

Así que bueno, ya lo sabe, no voy a negar que The Hangover III tiene sus momentos. Algunas cosas me han hecho reír, pero son muy poquitas. Y las historias así, tan pero tan pelotudas, reiterativas y escatológicas (sobre todo esto último) no solo no me causan gracia sino que, por el contrario, me dan repulsión e indignación de ver con qué poco algunas personas no solo se ganan el pan sino que viven incluso vidas de jeques árabes.

Y para los jeques árabes también tengo, si quieren venir a buscar.

Le pongo 3 Juanpablos.  

viernes, 13 de diciembre de 2013

Rubber (2010)






Con: Goodyear, Stephen Spinella, Jack Plotnick, Wings Hauser, Roxane Mesquida, Ethan Cohn y gran elenco

Dirección: Quentin Dupieux


Finalmente estrenamos Blue-Ray en casa, y como hace como tres años que pretendíamos estrenarlo con ansias pero sin éxito, y hace como tres años que entro al video club y veo con pena la copia de esta película que quise ver desde el momento mismo en que salió pero nunca pude hacerlo por no haber salido en DVD común y corriente, los muchachos del videoclub tuvieron la gentileza y, a modo de festejo por haber finalmente entrado al mundo Blue-Ray, me obsequiaron el alquiler de Rubber sin costo alguno. Gracias, muchachos.


Entonces, prosigo: 

Cuando vi el avance de esta película en alguna atracción de aquel 2010 de inmediato pensé en sólo dos opciones:

O era una de esas películas malísimas que visten los lunes de cada semana, o era una película de culto incomparable que haría mella en nuestros corazones.

Y me equivoqué, no es ninguna de las dos cosas.

Rubber trata sobre la triste historia de un neumático asesino (sí, quédese tranquilo y déjeme terminar), que misteriosa y mágicamente cobra vida enterrado en medio del desierto y comienza a rodar sin siquiera llanta que lo contenga y, al que se cruzare en su camino, le hace explotar por el aire la cabeza mediante una extraña vibración que se produce en su cuerpo (en el del neumático) mientras mira a su víctima profundamente a los ojos (…)

Y la verdad que es muy meritorio haber logrado hacer toda una película con esta trama tan retardada,  pelotuda e inadmisible, así que vamos a ponerle 4 Juanpablos, que se los merece.


Rubber es una película ideal para esos días en que uno anda con ganas de ver hasta dónde se puede llegar con eso de filmar cualquier pelotudez y salir razonablemente victorioso en la cruzada.

jueves, 12 de diciembre de 2013

“The Lone Ranger” (2013)



Estreno de la Semana


Con: Johnny Depp, Armie Hammer, William Fichtner, Tom Wilkinson, Ruth Wilson, Helena Bonham Carter, James Badge Dale, Bryant Prince y Barry Pepper

Dirección: Gore Verbinski


Mucho se ha dicho de esta película, destrozándola y señalando que fue hecha “a medida de Johnny Depp”, que su partenaire hacia “agua por todos los costados” y que éste “no le llegaba a los talones” y bla, bla, bla y yo me pregunto:

¿Qué pretendían?

¿Qué hicieran una película a la medida de Phil Collins cuando su protagonista es Johnny Depp?

¿Qué la película se sostuviera sobre los pilares de la pedorra historia que traía a cuestas Lone Ranger teniendo para sacar jugo de las tristes y muchísimo más interesantes experiencias que atravesara Toro en su niñez, fundamentales para la construcción de su errante y atractiva personalidad?

Entonces, teniendo claramente el papel de Johnny Depp por encima de su compañero de fórmula, ¿hubiera sido justo contratar a Marlon Brando o a Heath Ledger para que vistiera el papel de Llanero Solitario?

Por supuesto que no.

Alquilé “The Lone Ranger” con el escepticismo que traía aferrado desde que escuché todas esas inapropiadas y prejuiciosas críticas, y terminé riéndome en la primera escena.

Johnny Depp está genial, como corresponde, y este tipo de roles extraños le caen muy bien. Tiene un impresionante parecido al negro Olmedo cuando hacía de Mano Santa. Amo a Depp cuando encarna estos papeles. Odio a Depp cuando hace The Tourist.

Armie Hammer acompaña con estoicismo al lado de un actor demasiado resplandeciente sin quedar tan oculto en su sombra.

Ambos malos, Fichtner y Wilkinson, están bien diseñados y la manera de contar la historia, desde un futuro cercano, con el viejo Toro describiendo sus locuras de juventud a un niño ávido de aventuras, está bien construida, así que deje el prejuicio de lado, llévese una copia y disfrútela con sus hijos, que la va a pasar fenómeno.


Le pongo 7 Juanpablos.

miércoles, 11 de diciembre de 2013

“Despicable Me 2” (2013)






Con: Steve Carell, Kristen Wiig, Benjamin Bratt, Miranda Cosgrove, Russell Brand, Ken Jeong, Steve Coogan y gran elenco

Dirección: Pierre Coffin y Chris Renaud


Cuando una película tiene un tributo detrás de otro durante todo el transcurso de la trama comenzando con plagiar a Toy Story, pasando por MiniEspías o War World Z y hasta revivir a Bela Lugosi cuando gritaba que conquistaría el mundo en las absurdas películas de Ed Wood y, en lugar de hacer enojar o espantar como el caso de la película de ayer consigue que uno se recontra cague de la risa todo el tiempo, el mérito es aún mayor que si no tuviera esos guiños.

Steve Carell encuentra la horma de su zapato en este genial personaje y sus experiencias como padre de las tres niñitas son muy reales.

El único defecto: Las voces en español son tan pero tan retorcidas que se hace medio imposible conseguir entender lo que dicen, aún con el volumen al palo, así que si puede convencer a sus hijos de verla en inglés con subtítulos la pasará mucho mejor.

Y no puedo decir más que eso. Las secuelas son difíciles de construir y casi siempre se termina generando una historia, flaca, necia y pelotuda que tiene dos o tres momentitos salvables como el caso de la reciente criticada Monsters University.

Despicable Me 2 vino a mostrarnos que se puede hacer una segunda entrega igual de interesante que la primera, y eso no es poco.


Le pongo 7 Juanpablos.

martes, 10 de diciembre de 2013

R.I.P.D. (2013)







Con: Jeff Bridges, Ryan Reynolds, Kevin Bacon, Mary-Louise Parker, Stephanie Szostak, James Hong (¿sigue vivo? ¿cuántos años tiene?) Marisa Miller y gran elenco

Dirección: Robert Schwentke


No, muy floja. Un excelente ejemplo de lo que ocurre cuando un plagio a otra historia causa bronca en lugar de ternura.

Demasiado parecida a Men in Black.

Ni siquiera deberían haber intentado filmarla, o al menos hubiesen buscado actores menos importantes o no ser tan pero tan hijos de puta, hasta la sede policial es igual a la de MIB, cómo se ingresa, por donde se sale al mundo exterior... De cuarta.

¿Jeff Bridges?, Dios santo.

Ryan Reynolds nunca me terminó de cerrar, debe ser porque tiene el mismo problema que Juan Martín del Potro: la boquita muy chiquita, como Winnie The Pooh, aunque no lo sé.

Más allá de este enojo visceral, debo admitir que tiene sus momentos, no voy a negarlo. Dos o tres momentos. Pero es una falta de respeto monumental a una original y entretenida historia que no merecía esta atropello a la razón.


Así que le pongo 2 Juanpablos y lo invito a que la vea y se ofenda conmigo.

lunes, 9 de diciembre de 2013

“Bait” (2012)






Con: Richard Brancatisano, Xavier Samuel, Chris Betts, Sharni Vinson, Simon Edds, Miranda Deakin y la invalorable colaboración de Julian “cejitas depiladas” McMahon

Dirección: Kimble Rendall



Resulta que en una paradisíaca playa en donde el sol, la arena, el verde azulado de las olas, los jóvenes con torneados cuerpos y las muchachas esculturales sin una estría o un solo pozo celulítico a la vista disfrutan con vigor de un día de sol, arena, verde azulado de las olas, torneados cuerpos varoniles y muchachas sin estrías ni celulitis a la vista.

Y la vida es perfecta, aunque quizás esa no sea la palabra más adecuada ya que de solo leerla siento que me estoy quedando corto, así que mejor digamos que la vida es inestimablemente maravillosa. Y todos corren, escuchan música y se besan tras las rocas y se tocan el culo y toman cervecitas cuando de pronto, Brendan (pongámosle ese nombre, ya no recuerdo el real) decide salir a nadar mar adentro a bordo de una pequeña tablita cuando la alarma “tiburón a la vista” es soltada con desparpajo por nuestro director haciendo que la escultural Tina y el imponente Josh dejen para otro momento sus caricias y manoseos y salgan detrás de las rocas a correr la playa con desesperación en busca de su hermano/amigo para advertirle y/o rescatarle.

Pero todos sus esfuerzos son en vano. Josh no consigue llegar a tiempo. El tiburón come al pobre Brendan ante la mirada espantada de su hermana, Tina, quien ha quedado petrificada en la orilla, con ambas manos cubriendo su boca.

Estremecimiento. Dolor. Espanto. Desazón.

Y el tiempo pasa, como cantaba Pablo Milanés, y la película nos describe la actualidad, algunos años más tarde, donde Josh, ya alejado de su rol de guardavidas inexacto que deja morir a su mejor amigo  a manos de un tiburoncete de ocasión ahora se gana la vida trabajando en algo menos peligroso para la sociedad dentro de un supermercado cuando de pronto Cejitas Depiladas se dispone a ingresar al súper con el fin de robar el dinero de la caja amenazado por otro secuaz -muy mala persona y, sobre esta deleznable cualidad: horrible actor- llevándose al encargado hacia la oficina.

Y todo fluye con normalidad cuando de pronto un tsunami invade la ciudad balnearia y todo el mundo queda atrapado dentro del supermercado y con el agua al cuello.

Horror. Frío. Mercadería arruinada.

Y de inmediato vienen los tiburones, que entran al súper con el fin de conseguir alimento como lo hacemos nosotros, solo que ellos en lugar de agarrar changuitos y pasearse entre las góndolas con cara de zombie bajo la ténue melodía de alguna canción de Ricky Martin lo hacen nadando con destreza de escualo mientras los sobrevivientes deciden que lo mejor en estos casos es subirse a las góndolas y esperar ahí a ser rescatados. Pero esto no ocurre ni ocurrirá, nadie los rescata ni rescatará y los tiburones comienzan a ingeniárselas para lastimarles.

Y mientras tanto, en el subsuelo del supermercado que debería estar tapado completamente de agua siendo como es: un subsuelo de un lugar donde el agua en la planta alta llega al cuello de las personas, una parejita queda atrapada dentro de un BMW rojo sellado al vacío al que no le entra una sola gota en su interior a pesar de tener el agua a mitad de la ventanilla y que les brinda a los muchachitos la tranquilidad de quedarse ahí dentro intentando pescar señal con el celu o sintonizar una radio sin suerte.

Pero dentro del súper la cosa se pone cada vez más tensa –entre los actores, usted no sentirá tensión alguna- y aquel secuaz que, encapuchado, intentare robar el negocio por la fuerza cuando Cejitas Depiladas mostrara poca firmeza en su intentona de atraco, finalmente es descubierto por los demás luego de una sonsa discusión del momento y todos deciden tirarlo como carnada para entretener a los pescadotes hambrientos mientras el japonés novio de Tina decide sumergirse para cortar la luz todo cubierto de changuitos y jaulas de pájaro construyéndose así un traje-reja muy copado siendo que están todos parados sobre una góndolas de súper sin acceso a conseguir ni las herramientas, ni los precintos ni las jaulas de pájaro con las que atavían al oriental salvador, quien logra cortar el suministro eléctrico aunque no así mantenerse con vida, ya que se le enreda una cosa y termina ahogándose.

Y todos los extras comienzan a morir de a poco mientras Josh y Tina amenazan con perdonarse por el episodio de años atrás y la vida vuelve a sonreírles sobre aquellas góndolas de supermercado mientras los que estaban en el subsuelo encuentran la forma de subir al mercado y así entre todos lograr salir de ese lugar para poder contemplar el daño causado por el paso de este inoportuno tsunami que nos regalare esta pelotudísima película de tiburones, culos, malos actores e imbécil trama que, como un perfecto idiota, tomé aquella tarde de las estanterías de mi videoclub amigo para intentar entretener un fin de jornada sin conseguirlo.

Así que ya lo sabe, si usted gusta de perder el tiempo como un trastornado, no deje de mirar “Bait”, la va a pasar fenómeno.


Le pongo 2 Juanpablos. Los momentos en los que el malo abría la boca fueron desopilantes. Un aplauso para este horrible actor que es Dan Wyllie, un experto de la vergüenza ajena.

viernes, 6 de diciembre de 2013

Vino para robar (2013)





Con: Daniel Hendler, Valeria Bertuccelli, Martín Piroyansky, Pablo Rago, Juan Leyrado, Mario Alarcón y gran y absurdo elenco

Dirección: Ariel Winograd


Bien. Genial. Hermosa. Sublime.

Hendler descorcha una nueva manera de hacer humor pelotudo, que ya la había mostrado en Fase 7 y que tan pero tan bien le calza.

Bertuccelli está increíble y consigue hacer reír incluso a un amigo que no la soporta demasiado (según su propia confesión) mientras que Piroyansky continúa con su papel -que aún no cansa pero le falta cada vez menos-, Leyrado compone de manera magistral su rol haciéndonos sorprender ya que no lo imaginábamos en este tipo de género y Mario Alarcón, como siempre: PERFECTO.

Es tan pero tan divertida que voy a pasar por alto el temita de los nombres de los personajes, que parecen salidos de “Boutique”, libro de mi autoría publicado hace unos años aunque sin la fama necesaria para que todo el mundo lo conozca.

Así que ya lo sabe, si gusta del humor pelotudo, del chiste pavo y de las escenas sonsas por doquier, tiene que ver esta película, a la que no me temblará el pulso a la hora de ponerle 7 Juanpablos y bancarme lo que sea que se venga.

No tiene nada mejor que hacer este finde que alquilarla.