Dirección: Juan Carlos Fresnadillo
No está mal, tampoco es “guau, qué pedazo de película”.
Es entretenida. Sorprende ver a Daniel Brühl hablando perfecto castellano como si fuera un español nacido en el corazón mismo de Barcelona y haciendo que este humilde servidor se ponga a investigar el porqué de su perfecto español, advirtiendo que el tipo nació precisamente en el corazón mismo de Barcelona, y por eso su facilidad para hablar castellano aparte de su normal alemán que hemos disfrutado en Unglorious Bastards.
También sorprende ver caminando a Hector Alterio compartiendo una charla con este pibe que hace muy poquito trabajó en la de Tarantino, como sorprende que Clive Owen se defienda lo más bien hablando en castellano.
En definitiva, una película llena de sorpresas insípidas que no son para tanto, pero que lo encontrará diciendo: “Mirá, el tipo”, o “Mirá, Alterio”, o “Mirá como habla en español”, y esas tonterías que uno señala cuando es sábado, son las 6 de la tarde y no tiene nada mejor que hacer que mirar una película alquilada donde un montón de tipos hablan en otro idioma que el habitual que uno les conoce.
Ella Purnell va a ser muy linda cuando crezca.
Le pongo 5 juanpablos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario