lunes, 20 de febrero de 2012

Arena (2011)



Con: Samuel “No tengo fondo” Jackson, Kellan Lutz, Johnny Messner, Katia “No me importa mostrar la empanada por 2 mangos” Winter y el invalorable aporte actoral del único, del inigualable, del supremo: Daniel Dae Kim.

Dirección: Jonah Loop

Yankie Musculoso está jugando un estúpido partido de futból americano ante la mirada alentadora de un público bastante reducido que observa el partido desde unas pedorras gradas y cuando concluye el match corre hacia ellas (las gradas) a besarse emperifollado con su amor, una morochita re dulce que está como de 25 meses de embarazo, a punto ya de parir. Y se besan con golosa ternura hasta que morochita le pide, con solo regalarle una sutil mirada, que se saque el protector bucal, ya que Yankie Musculoso, como todo yankie musculoso, salió del partido con el protector bucal puesto, el muy pelotudo.

Y entonces se suben a su potente 4 x 4 norteamericana y se disponen a volver a su hogar mientras Morochita Tierna intenta acomodarse en el asiento sin conseguirlo, está muy panzona y muy a punto de parir por lo que se le complica encontrar una buena posición.

Y todo es feliz y el mundo les sonríe y ellos actúan muy pero muy mal las escenas y se detienen en un semáforo y una camioneta los embiste a toda velocidad, matando obviamente a Morochita Tierna, que por supuesto pierde el bebé hundiendo a Yankie Musculoso en la más profunda depresión, ya que hubiera preferido morir él, que solo contabilizó un estúpido rasponcito en la frente en aquel desafortunado accidente.

Mientras tanto, en algún lugar de incógnito, el célebre director del más sangriento juego de internet, Samuel “No tengo fondo” Jackson, da las primeras órdenes a sus dos esclavas japonesas para que comiencen a desparramar cosas invisibles en un escritorio de vidrio blanco súper copado que hace las veces de I-Pad gigantesco y es el ordenador que envía la información a los millones de hogares que siguen con desesperada desesperación las desesperantes luchas que el negro presenta.

Y todo el mundo supone que solo es un juego de internet, aunque muchos señalan que no, que es verídico y que las muertes son reales (Igual que en “Gamer”, esa estúpida película con Gerard Buttler de hace un par de años nomás pero que se ve que a Hollywood no le interesa que ya haya una película así, que incluso es bastante pedorra, y que de entrada, antes de filmar este plagio ya deberían saber que no tiene futuro, pero bueno…), así que el mundo todo está prendido a su notebook porque ya está por empezar la nueva pelea entre un negro y un tipo todo tapado. Y comienza, y el negro le tira un cuchillazo, y el tipo todo tapado lo elude y le zampa flor de mazazo en la espalda con un arma muy intimidante que tiene en su mano derecha, y el negro se da vuelta y le pone un hachazo en el tórax, y el tipo todo tapado se recupera (sí, rarísimo) y así pelean, se cortan y se hacen mucho daño mientras el público aplaude y apuesta por uno o por el otro mientras Samuel “No tengo fondo” Jackson observa el rating con alegría e imagina cómo se está engrosando su cuenta bancaria mientras el FBI, la Interpol, la KGB, el grupo Halcón y los bomberos zapadores de la localidad de Potosí, en Bolivia, intentan sin éxito, encontrar al negro, encarcelarlo, y dar por terminada su red de sangrienta mafia internetística.

Entonces la película vuelve a Yankie Musculoso, que está completamente borracho, apoyado tontamente en la barra de un bar de mala muerte mejicano, mientras cabecea e intenta mantenerse en pie y le pide a la bartender que le dé otra botella de esas que ya se tomó una y se va al baño, tambaleando como el borracho que es. La bartender, lejos de tomarle el pedido, le cabecea al tipo más mal actor del mundo, que hace de patovica del bar, como diciéndole: “Ve al baño y cágalo a trompadas, Manuel”, suponiendo que el tipo se llama Manuel, nunca dicen el nombre, pero calculo que se debe llamar Manuel. Tiene cara de Manuel el tipo. Y Manuel va hacia el baño, caminando como un pelotudo lleno de músculos y entra, pero en un instante sale despedido con puerta y todo en cámara lenta, completamente desmayado por la tunda recibida dentro del oloroso recinto.

Y una bonita joven que estaba en el mugriento bar vestida para el infarto, sonríe como diciendo “Éste es bueno” y se levanta y se va a fuera a esperar que Yankie Musculoso desista de seguir tomando y vuelva a su hogar. Y al ratito nomás, Yankie Musculoso sale y ella lo para de pecho en la vereda y le dice que la lleve con ella, que se lo quiere coger. Y como a él ya nada le importa, incluso darle masa a interesante morocha, se la lleva a su habitación de mierda mejicana donde está parando y comienza a besuquearla toda mientras ella se saca el vestido y se queda completamente en pelotas sin importarle un carajo que haya 2 o 3 cámaras filmando la escena y un sinnúmero de ayudantes y técnicos y camerámans y todas esas cosas que hay en un set de filmación, entonces Yankie Musculoso intenta infructuosamente arrimarle el bochín y ella se separa un toque y le tira un cosito en el pecho que lo paraliza y lo deja muerto en el piso. Luego lo mira con gran seducción y se va en pelotas a abrir la puerta de la piezucha para que ingresen los señores que estaban detrás de la puerta y metan a Yankie Musculoso en una bolsa de muerto y se lo lleven.

Y Yankie Musculoso despierta a los gritos y se da cuenta que está en una celda y que no tiene salida y que está secuestrado. Y vienen todo el tiempo unos tipos y lo torturan y lo vuelven loco y le dicen cosas feas (tonto, forro, cagador; cosas así) para perturbarlo y lo perturban y a él no le queda otra, con lo perturbado que está, que acceder a pelear en esas imbéciles batallas (Igual que en “Gamer”, esa estúpida película con Gerard Buttler de hace un par de años nomás pero que se ve que a Hollywood no le interesa que ya haya una película así, que incluso es bastante pedorra, y que de entrada, antes de filmar este plagio ya deberían saber que no tiene futuro, pero bueno).

Y pelea, y pelea, y pelea. Y a todos los desnuca o desmiembra, no sin volver a su canil con un sinfín de heridas súper profundas que le van dejando el cuerpo desfigurado mientras es atendido por Morocha Cotorra Al Viento, que lo cose sin anestesia y sin el más mínimo implemento esterilizado, haciendo que uno diga “bueno, al menos va a morir pronto de una terrible infección y no va a tener que pelear más”, pero se ve que el lugar, a pesar de estar bastante sucio y abandonado no contiene ni un solo germen o bacteria, y Yankie Musculoso no solo no se infecta de nada sino que consigue sanar rápidamente de sus crueles heridas, meta empomarse Morocha Cotorra Al Viento y meta comer un arroz con garbanzos muy poco atrayente que le tiran en una bandeja como si fuera un perro.

Entonces un día aparece en su celda Samuel “No tengo Fondo” Jackson y le ofrece 10 peleas a cambio de su libertad, cuando generalmente los secuestrados terminan muertos o en las peleas o por los secuaces de Jackson, que los ajustician cuando ya hayan ganado para que no hablen y no se descubra el búnker incansablemente buscado por el FBI, la Interpol, la KGB, el grupo Halcón y los bomberos zapadores de la localidad de Potosí, en Bolivia.

Así que Yankie Musculoso tiene una oportunidad de sobrevivir (cuando en realidad él lo que quiere es morirse de una vez porque no tolera más este mundo sin su mujer y su hijito que al final no conoció por ese terrible accidente que tuvo, pero ahora parece que quiere vivir. Una contradicción a la derecha, por favor). Y entonces pelea, ganando todos los matches y llegando a la intrépida final, dónde deberá batirse con el temible Kaden, que es más malo que Lilita Carrió en uno de esos días en que se levantó mística y extraviada (O sea, cualquier jornada de su vida), pero Yankie Musculoso, luego de amenazar varias veces en caer rendido ante los temibles puños de Kaden, de golpe se pone bien, como Rocky Balboa, y lo recaga bien a cachetazos, al punto de arrancarle la cabeza en aquella última trompada.

Y aunque muchas fuerzas no le quedan porque también recibió su merecido, sale en busca de Samuel “No Tengo Fondo” Jackson, quien no imaginó que Yankie Musculoso saldría vivo de esa pelea. Así que al negro ahora le chifla el orto del miedo, porque sabe que lo buscará y le propinará una golpiza que lo dejará viendo crecer las margaritas desde abajo, por lo que agarra un bolso y se pira, tocando los tarros, mientras Yankie Musculoso camina por un laberíntico pasillo enjaulado, todo ensangrentado pero con actitud asesina en su búsqueda, mientras irrumpe en el lugar el FBI, la Interpol, la KGB, el grupo Halcón y los bomberos zapadores de la localidad de Potosí, en Bolivia, que descubrieron finalmente el aguantadero y se encomiendan también a atrapar al negro.

Pero Yankie Musculoso ya lo cazó primero y ya le clavó algo en el hígado que hizo que Samuel “No Tengo Fondo” Jackson escupa un importante y espeso chorro de sangre oscura por la boca. Y ya le está por dar el golpe final cuando entran en el recinto el FBI, la Interpol, la KGB, el grupo Halcón y los bomberos zapadores de la localidad de Potosí, en Bolivia, y le dicen “No, Yankie Musculoso, detente. No lo hagas”. Y entonces no lo hace y lo cubren con una frazada (nunca entendí por qué hacen eso) y lo meten en una camioneta como quien se lo lleva para cuidarlo y sanarlo mientras el FBI, la Interpol, la KGB, el grupo Halcón y los bomberos zapadores de la localidad de Potosí, en Bolivia, se llevan esposada a Morocha Cotorra Al Viento, que lo mira con tristeza y le murmura de lejos “Lo siento”, y termina este bodrio inusual mal actuado, mal dirigido, mal guionado y copiado de un montón de películas de por sí malas.

Para mí, y saben que detesto hablar al pedo, Samuel L. Jackson es burrero, o le gusta la timba, porque es imposible que haya aceptado trabajar en esta mierda si no fuera porque está realmente necesitado de billetes rápidos. Debe endeudarse como loco cada 15 minutos y su fortuna, más la ayuda que le puedan haber dado en varias ocasiones algunos amigos importantes como Quentin Tarantino o Robert De Niro, ya se agotó hace rato y es altamente probable que en pocos meses lo veamos participando de algún reality o haciendo la propaganda del desafío de la blancura de jabón Ace, acuérdense de mí cuando lo vean.

Kellan Lutz (Yankie Musculoso) es un hijo de su madre que viene de la saga de vampiritos para quinceañeras “Crepúsculo”, y se ve que hizo muchas abdominales y tiene buenos músculos y consiguió este inmundo protagónico. Pero debería ausentarse para siempre de la pantalla grande, de la mediana, de la chica y de la radio, incluso de tweeter, facebook y de los mensajitos de texto. Lo ideal sería que se pegue un tiro en las pelotas y se deje de joder.

Katia Winter es muy linda, pero es una pena que se la haya volado así en este bodrio, en donde se la pasa mostrándose en pelotas al cuete. No valía la pena entrar en este juego perverso, Katia. Espero que no estés lo suficientemente arrepentida como para largar todo y ponerte una farmacia. Intenta una vez más y no te desnudes tanto. Tú puedes, jovencita.

No puedo ni siquiera imaginarme poniéndole 1 Juanpablo a esta basura. No me lo perdonaría.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Jajaja... buenísima, una de las mejores criticas que te he leído amigo.
Me la descargo ya para segur la estudiantina. Que sigan los éxitos.

Gilmour, Juan Carlos dijo...

Gracias, me halaga mucho que se diviertan con mis disparatadas ocurrencias