Duel (1971)

 Recomendación Arcaica

Con: Dennis Weaver y Carey Loftin

Dirección: Steven Spielberg

Para entender la importancia de Duel en la filmografía mundial hay que poner sobre la mesa de discusión varias cuestiones, a saber:

Spielberg dirigió éste film con 25 años, dos años antes de Jaws. No conozco otro director que haya sido tan talentoso, profesional y maduro a esa edad. Salvo excepciones como Tarantino y Anderson, que ya dejaron claro igual que Steven que vinieron a este mundo a crear historias sin vencimiento.

La tensión que Steven genera en el público con un simple viajante y un camión oxidado no la he vuelto a ver en mi vida. Nunca. Y que toda la película esté centrada en una sola actuación y con un actor del montón como Weaver deja a uno pensando en dos cosas: O Weaver es un Heath Ledger del que nadie tomó nota y se perdió la carrera como el Trinche Carlovich, o Spielberg fue un genio.

Y si a esto le agregamos que nunca jamás se ve al camionero, salvo a la mitad de la película cuando, para generar aún más odio y tensión, Steven nos regala un plano de sus botas tejanas pegándole taconazos a las cubiertas mientras espera por recarga de combustible, no podemos más que admitir otro de los logros de esta obra maestra, pero mejor no le cuento más nada, lo dejo con la inquietud y lo insto más que nunca a que si aún no la vio, vaya esta misma tarde a alquilarla o búsquela en internet.

Recordé Duel porque ayer andaba dando vueltas por Facebook una suerte de cuestionario sobre quienes son tus ocho directores preferidos entre Hitchcock, Coppola, Scorsese, Anderson, Tarantino, Kubrick, Allen y Spielberg, y no pude más que ponerlo en 7mo lugar salvándose del último puesto a manos del viejo Alfred, porque con los años Steven se oxidó como no podría ser de otra manera y esta semana vi Bridge of Spies, película re pavota y ultra tontísima que me sorprendió con tristeza contemplar su nombre al final del film como director del mismo. Y Tarantino dijo: “Voy a filmar solo 10 películas”, y me parece que es una buena decisión la de Quentin, porque seguir y seguir cuando ya no hay nada para ofrecer no tiene mucho sentido y mancilla tu propio nombre. Como Schumacher cuando insistió en seguir corriendo y ya le sacaba una vuelta el más boludo de todos o como David Gilmour sacando ese espantoso último disco de Pink Floyd “The Endless River”. Hay que saber dar un paso al costado en el momento justo, hay que tener la cabeza fresca, respetar tu propia historia y ser objetivo. Y me dio tanta pena lo que vi en el último film de Spielberg que no puedo más que recordar sus inicios, cuando era un pura sangre dispuesto a todo y grabó a fuego varias películas en nuestra cabeza.

Mire Duel. No lo va a poder creer.

Le pongo varios cientos de Juanpablos.

The Hateful Eight (2015)

Con: Samuel L. Jackson, Kurt Russell, Jennifer Jason Leigh, Walton Goggins, Demián Bichir, Tim Roth, Michael Madsen, Bruce Dern, James Parks, Dana Gourrier, Zoë Bell, Channing Tatum y elenco

Dirección: Quentin Tarantino

Bien. Quentin vuelve a deleitarnos con su exquisita locura, con sus siempre melodramáticos finales con bombos, coágulos y platillos y con historias que valen la pena ser contadas solo por él.

Aunque quizás no esté a la altura de Django Unchained, su último film –quizás el mejor de todos los de su autoría desde el modesto punto de vista de este fanático de sus publicaciones-, The Hateful Eight arranca medio lenta –los capítulos antes de llegar a la mercería de Minnie podrían haberse resumido un poco y no hubiese torcido el rumbo de lo que vendría-, pero luego, una vez en curso, solo podemos quedarnos como niños extasiados viendo una nueva entrega de nuestra serie favorita. Y no hay otro director que consiga hacernos sentar en el piso con las manos anudadas abrazados a las rodillas con el gesto expectante del iluso que cree aún no haberlo visto todo y que, durante el transcurso del film, verá lo mismo de siempre pero se sorprenderá como si jamás lo hubiese experimentado.

Y eso es lo que hace que Quentin Tarantino sea hoy por hoy el mejor director de cine que tenemos, más allá de su talento insuperable para convertir en un actor de pacotilla en John Cazale y muy por encima del talento de pasarse la vida tributando cosas ya hechas pero muy mejoradas por su implacable pluma.

De Hateful me quedará en el recuerdo el tremendo aporte de Damien Bichir, alma del film, grandísima composición de mejicano del siglo XIX, la increíble transformación de Jennifer Jason Leigh y sus geniales tributos a Carrie y The Exorcist, el preciso cowboy que descubrió en Goggins (lo trajo de Django) y el incuestionable liderazgo que imprime Samuel L. Jackson cada vez que Quentin lo convoca a actuar.

El resto un poco flojo y no a la altura de lo que estaban dibujando y quizás ahí tengamos la respuesta a por qué Hateful no supera a Django, donde todo el mundo, absolutamente todo actor participante, ha dejado el corazón en su composición. En Hateful Russell no convence del todo, Roth pretende imitar a Waltz y no le sale y Dern en su rol de viejo calladito no me llega a ningún lado y por momentos estorba la visión.

Y, párrafo aparte, Channing Tatum, actor pavotísimo que no tiene que ver con el cine en serio y que, una vez más, Quentin consigue hacernos creer que es descollante.

Y eso es todo lo que podría decirles del octavo film (de diez, recientemente avisó que más de 10 películas no va a hacer) de Quentin Loco de Mierda Tarantino. Un film que iré a ver al cine dos veces más porque con una sola no me alcanza y pretendo advertir todos y cada uno de los detalles.

Le pongo 7 Juanpablos y lo invito a que la vea.

Roger Waters The Wall (2014)

Con: Roger Waters, su banda actual y sus hijos

Dirección: Sean Evans y Roger Waters

Está bien, pasa que hay dos pilares que protagonizan todo el film que contrastan como loco: La historia de su padre y abuelo contada por el mismo y el show del disco The Wall que está brindando por el mundo entremezclando ambos pilares como quien revolviese con parsimonia una enorme ensaladera.

Nuevamente Roger consigue su cometido a la hora de contar por enésima vez lo mal que la pasó de niño por culpa de la estúpida guerra sin su papá, y todas las escenas en su casa o en el auto o en los monumentos a la memoria desperdigados por el mundo que visita incluso con sus tres hijos, y la manera en que consigue aggiornar la historia es para quitarse el sombrero y volver a aplaudir de pie (y ya van mil veces) esta reiterativa obra que, habiéndola experimentado desde mis 14 años, ya empiezo a convencerme que nunca morirá, nunca pasará de moda, siempre estará vigente y el día de mañana, cuando pasen 200, 300 o 400 años y ninguno de nosotros estemos en este planeta seguirá siendo escuchada por esa gente del futuro que ni siquiera vivió en los setentas del siglo pasado, la década más espectacular que ha tenido la historia del rock mundial.

Luego, el show. Lamentablemente Roger insiste con aquello de que cualquiera puede tocar las canciones de su autoría y lo único que se necesita es contratar músicos pagos y listo, y a pesar de que hizo las paces con la banda y hubo acercamientos y se han olvidado las viejas disputas, alguien de su entorno debería aconsejarle que los sesionistas no califican para tocar temas de rock. Kilminster está muy bien y consigue acercarse a sonar aunque sea parecido a Gilmour, hay que subir esa escalera infinita y salir razonablemente bien parado, la verdad es que es para aplaudir lo que hace –más allá de que yo me cortaría el pelo y no revolearía la cabeza como un pelotudo heavy metal de los 80, debería tener un poco más de respeto por lo que está imitando y mantenerse en estricto segundo plano, pero vieron cómo son ese tipo de violeros… Ombligos del mundo-. Snowy ayuda muchísimo en su eterno rol de segunda viola de Pink Floyd en vivo y justamente Kilminster debería aprender de su recontra bajo perfil. Snowy sí tiene cucardas para hacerse el loco en el escenario ¡Tocó con Pink Floyd en vivo desde la era Animals!, aprende de tus mayores, guitarrista pomposo.

Ahora bien, ¿el resto?, neutros y opacos como no podrían haberse superado a excepción del viejo Graham Broad, sesionista irremediable que consigue hacer sonar la batería un poquito rockera –pero muy poquito-, pero voy a detenerme en el niño que eligió para reemplazar la sección “garganta” de David Gilmour, un tal Robbie Wycoff…, podría decir un montón de cosas de este joven insípido, inexperto y atenido al plan con la rigurosidad de una vieja y terca Commodore 64, pero quizás la mejor manera de describir su fofa e insulsa forma de tomar esa tremenda posta sería algo así como si Roger Waters hubiese contratado a Diego Topa para que cantara las partes de David, y creo que con esa comparación usted más o menos se da cuenta qué quiero decir.

Roger Waters ha conseguido exasperar a su público más acérrimo con todo tipo de músicos del montón más pelotudos e incalificables que no sé qué, pero creo que claramente este infeliz supera por mucho a cualquiera de esas estatuas sin sangre que contrató en el pasado.

Y eso es todo –bastante, a decir verdad- lo que puedo decirles de la nueva publicación Roger Waters The Wall. Genial edición. Emotiva como siempre pero tocada por un séquito de papafritas a excepción de los violeros que no podrían haber sido peor elegidos.

Así que le pongo 5 Juanpablos, 10 para lo nuevo, nada para lo viejo reformulado.

Entourage (2015)

Con: Adrian Grenier, Kevin Connolly, Jerry Ferrara, Kevin Dillon, Jeremy Piven, Emmanuelle Chriqui, Perrey Reeves y elenco

Dirección: Doug Ellin

¿Vieron cuando una serie de TV sobre chicos lindos y minas semi en pelotas protagonizada por actores a los que no les da el piné para laburar en serio entonces como hay que comer ni se les ocurre laburar en una gomería no les queda otra que participar en esa tontería con insuperable calidad de photoshop como único estandarte de pronto tiene un rating apenas por encima de lo que esperaban y entonces algún productor de esos de medio pelo que abundan en Hollywood piensa –si se puede describir eso como pensar- que sería una buena idea montar un film sobre exactamente lo mismo pero con calidad de cine y muchísimo más photoshop que aquel que puede disfrutarse en la tele?

Bueno.

Le pongo 1 Juanpablo y lamento el presente de Jeremy Piven, quien no hace mucho tiempo había colaborado en algunos films discretos.

Ah, párrafo aparte: Kevin Dillon es igual a su hermano pero al igual que con el Diego tiene el talento del Lalo Maradona (pobre Lalo, qué feo debe haber sido, o quien sabe el tipo se recagó de la risa y disfrutó por dentro viendo cómo esperaban de él lo que fuera solo por cargar con un potente apellido, hay que ver… Cada persona es un mundo, diría empresa de telefonía celular de estos pagos)

Irrational Man (2015)

Con: Joaquin Phoenix, Emma Stone, Parker Posey, Tom Kemp y elenco

Dirección: Woody Allen

Mmm, no. Qué le vamos a hacer… Finalmente llegó el día en que Woody Allen entregaría algo no del todo atrapante, medio fofo y aburrido y aquí estamos con un film del gran Woody Allen no del todo atrapante, medio fofo y aburrido.

Phoenix no encontró la forma de vestir su personaje –no lo culpo, estoy seguro que este resultado es producto de no haberse encontrado con el director, y que Allen no haya podido encontrar a Phoenix… habla a las claras que a veces no es una buena combinación aquello que por obtención de cucardas pareciera un éxito rotundo antes de empezar a hablar-, Stone ya agotó su estirpe de chica Allen –debería abstenerse de participar en las próximas cinco películas de Woody, quien sabe así volvamos a enamorarnos de sus colaboraciones- y la película pareciera echa demasiado rápida, a los resantos pedos. No quiero hablar al cuete pero juraría que alguno de los protagonistas tenía otro compromiso demasiado pronto y tuvieron que filmar en la mitad del tiempo estipulado para cumplir ambos contratos.

Ojo, tampoco crea que Irrational Man es la película más mala del mundo, para nada, tiene todo lo que un film de Allen siempre expone, pero aburre, no enamora y me dormí un par de veces sin lograr viajar a gusto en su siempre confortable colectivo, y considerando que las últimas fueron tan geniales…, qué sé yo, una pena.

Así que van 5 Juanpablos para el último film de este director petiso y octogenario que casi siempre la clava en el ángulo y que en esta ocasión pateó como el Pipita.

Jeder für sich und Gott gegen alle (1974)

Recomendación Arcaica de viernes 

Con: Bruno Schleinstein., Walter Ladengast, Brigitte Mira, Willy Semmelrogge, Michael Kroecher y un montón más.

Dirección: Werner Herzog

Otra genialidad de Herzog y ya van varias. Excelente historia real de principios del siglo XIX.

Exquisita filosofía la de Kaspar, con magníficas –y cuasi extraterrestres para boludos como nosotros- interpretaciones de las distintas cuestiones cotidianas que nos rodean en este mundo.

La película es vieja y ya no surte el mismo efecto que en su estreno, pero lo más destacado del film es haber encontrado en Bruno Schleinstein esas cualidades actorales siendo como fue en la vida real: un niño golpeado por su madre prostituta hasta dejarlo sordo de un oído y habiendo vivido en montones de institutos para huérfanos problemáticos sin estudio alguno sobre actuación. Gran logro de Werner y ya deberíamos hacerle un monumento en alguna plaza.

Ver esta peli hace que uno se pregunte qué hubiera pasado con la humanidad si no hubiese habido una escuela sobre cómo vivir y qué hacer.

De seguro seríamos mejores individuos.

Jeder für sich und Gott gegen alle es al cine lo que Ummagumma es a la música.

Le pongo miles de Juanpablos.

Ant-Man (2015)

Con: Paul Rudd, Michael Douglas, Corey Stoll, Evangeline Lilly, Bobby Cannavale, Judy Greer, Michael Peña y elenco

Dirección: Peyton Reed

Bien. Buena película de Marvel.

En Rudd encontraron la persona idónea para vestir semejante tonto héroe, el tonto heroísmo de tan disparatada historia no puede más que divertir a nuestros queridos adolescentes y el film viaja con ímpetu ganador desde que comienza hasta que termina con esa bobísima escena final en donde Michael Peña describe a su amigo Ant-Man cómo debería ser el siguiente golpe y un montón de actores van explicando el mecanismo del mismo haciendo que hablan pero con la voz del mejicano que una vez más no muere ni deja huérfanos a dos mejicanitos y una esposa de vestido floreado y delantal llorando mientras lava los platos en una modesta casa pintada con tonos ocre y rojo tiza.

Entonces, ¿usted debe ver esta película? No, para nada. ¿Usted tiene hijos adolescentes y pretende pasarse un momento de relax y diversión con ellos sin padecer una estúpida saga de amor y chicos lindos o una imbécil nueva secuela de Avengers infestada de explosiones? Ant-Man es para usted (y aprovéchela, porque sin dudas el año que viene llegará la nueva imbécil secuela de Avengers en dónde le darán la bienvenida a Ant-Man y seguirán subiendo la apuesta de las explosiones y ahí sí estará frito, amigo)

Así que le pongo 7 Juanpablos y lo invito a que la vea.

Bizarre (2015)

Con: Pierre Prieur, Adrian James, Raquel Nave, Rebekah Underhill, Charlie Himmelstein, Luc Bierme y elenco

Dirección: Étienne Faure

Bien. Genial película de Faure.

No podría decirles mucho más sin meterme de lleno a contar de qué va y la verdad es que sería un sacrilegio que perdiesen la experiencia de verla completamente en bolas como me pasó a mí.

Prieur, exacto y James, insuperable. Gran actuación de este jovencito. Conmovedora versión de Smile.

No sé cómo hacer para arrimarlos al género sin dar demasiadas explicaciones, pero lo que le digo es que si usted es un amante acérrimo de films como Furious Seven o Rambito y Rambón, la verdad es que no le recomiendo ver Bizarre porque me va a odiar hasta el último día de su vida.

Le pongo 8 Juanpablos.

The Martian (2015)

Con: Matt Damon, Jessica Chastain, Kristen Wiig, Jeff Daniels, Michael Peña, Sean Bean, Kate Mara, Sebastian Stan, Aksel Hennie, Chiwetel Ejiofor y elenco

Dirección: Ridley Scott

Yo sé que usted va a pensar que enloquecí, que cómo voy a decir estas cosas del gran Ridley Scott, que la boca se me haga un láu y todo eso. Pero más allá de que el film está muy bien constituido, con un Marte de mentira que realmente uno cree que el film fue filmado en el planeta rojo con la pluma de un director que pareciera haber nacido en otro planeta y por ello le salen tan bien las películas espaciales y todo eso, la realidad es que el tono ¿gracioso?, ¿sonso?, ¿cabeza de chorlito? que inunda tanto la trama como el personaje principal y la falta total de momentos depresivos o realmente tensos que debería acreditar una historia como esta me dejaron así con las manos abiertas enfocadas al cielo y la expresión demudada y atónita como una suerte de Carlos Messina pero con el rictus sorprendido más que iluminado cuando se acercaba peligrosamente el final del film y nada, absolutamente nada de lo que hubiese esperado de Ridley Scott y de la historia de un astronauta a quien sus compañeros creen muerto y abandonan en un lejano planeta pero en realidad está vivo y con una leve herida en la zapán y entonces para recuperarlo habrá que gastar muchísimas horas, días, semanas y meses y nada de lo que los matemáticos de la NASA calculen en jornadas sin sueño tiene la certeza de efectividad 100% por lo que, al menos, Matt Damon debería haber padecido una temporada de sombría depresión y/o locura, debería haber intentado suicidarse, debería haberse demacrado hasta el ridículo y, con un invisible hilo de aliento, intentar la utópica tarea de salir rajando de ahí de manera exitosa.

Y nada de eso ocurre, Matt se pasa unas vacaciones re copadas en Marte con tiempo de sobra para hacer chistes y mandar al presidente de los Estados Unidos a cogerse a él mismo y qué sé yo cuántas pelotudeces más que no tienen nada que ver con la realidad de lo que podría pasar si esto fuese cierto.

Luego, Jessica Chastain está perdida, Wiig irreconocible, Daniels parco como nunca, Mara a mil kilómetros de su personaje y el resto acompaña sin demasiado sacrificio.

Sorprende Peña, quien debería haber muerto de manera espantosa y dejado hijos mejicanos huérfanos y una mujer con delantal y vestido floreado lavando los platos mientras llora su viudez, pero no, se salva.

Así que lo lamento mucho, Ridley, jamás hubiese imaginado que pondría a The Martian solo 4 Juanpablos carachientos.

Esfuérzate más la próxima. Tú puedes.

Y por favor, de rodillas lo pido: La próxima vez que a alguien se le ocurra una historia en donde montones de tipos y minas deben colaborar en conjunto para rescatar a un chabón, busquen otro actor. Matt Damon ya lo hizo tres veces.

Turkey Shoot (2014)

Con: Dominic Purcell, Viva Bianca (¡¡¡VIVA!!!!), Robert Taylor, Belinda McClory, Nicholas Hammond y elenco

Dirección: Jon Hewitt

Resulta que Dominic Purcell, harto de hacer pesas, evitar las medialunas y la cerveza y pasarse el día en el gimnasio para dar el target de musculoso actor de pacotilla a quien Hollywood debería contratar para el próximo film de acción, piñas o soldados pero no consiguiendo aunque más no sea un bolo en alguna película discreta del género y viendo cómo se le termina el dinero obtenido en alguno de los 4 o 5 films de renombre en donde logró participar con mucha suerte, agarró y dijo “Yo me voy a hacer un film para mí. Qué me importa si no me llaman. Tengo estos 7.800 dólares y seguro que algo voy a poder generar. Está mi prima, que es más fea no ya que Yoko Ono sino más fea incluso que el culo de Yoko, y tengo estos vecinos que siempre me están rompiendo las pelotas para que los nombre con algún productor porque piensan que actuar es re fácil”, entonces los convocó en el patio de atrás de la casa, les ofreció 300 dólares a cada uno y mientras se comían unas salchichas con kétchup pusieron un viejo VHS de su colección privada y se pasaron un lindo domingo viendo Turkey Shoot, de 1982, y de inmediato se dijeron, al unísono “Che, ¿y si hacemos una remake de esta película berreta? ¿Justo acaban de estrenar Los Juegos del Hambre y está de moda lo de las cacerías”, así que de inmediato decidieron que deberían cagarse a palos en el bosque y que haya un ganador como si fuese un juego perverso.

Y así fue entonces que filmaron Turkey Shoot, una película de malos actores y extras por completo desconocidos que deben participar en un programa televisivo que los despliega en un bosque y deben cazarse y aniquilarse de la misma forma que en esas películas tontas para adolescentes, pero sin siquiera el talento para lograr un producto al menos regular remaekeada para colmo de una boluda película de principios de los 80 que si chusmea un par de minutos por youtube no lo va a poder creer..

Decir que este film es malo sería faltarle el respeto a la palabra malo.

Le pongo 1 Juanpablo. La escena inicial en donde ese pseudo tirano viejo y pelado lleno de cucardas chasquea los dedos frente a un ventanal para que se acerque su semidesnuda dama de compañía y lo desvista sin que al menos modifique su rictus de tipo despiadado dejándolo en calzones y le meten flor de corchazo en la frente desapareciéndole la cabeza es tan graciosa y pinta de cuerpo entero de manera más que expeditiva la recontra tontería que veremos a continuación, que la verdad es que no se puede creer.

Full Metal Jacket (1987)

Con: Matthew Modine, Vincent D'Onofrio, R. Lee Ermey, Arliss Howard, Adam Baldwin, Dorian Harewood, Kevyn Major Howard, Ed O'Ross y gran, gran elenco.

Dirección: Stanley Kubrick

Una de mis películas preferidas sobre Vietnam, con unas actuaciones de D'ónofrio, Modine, Ermey y Howard que solo pueden construirse de la mano de este irreemplazable director de cine que tantas películas bisagra nos ha dejado como legado.

Pero por sobre todos me quedo con Vincent D’onofrio, quien se zarpó con garbo en su composición de Gomer Pyle. No consigo encontrar otro actor que haya logrado esa actuación que va de un extremo al otro tan sutil y sistematicamente.

Full Metal Jacket es una de esas películas que no me canso de mirar. Y eso que la miro, y la miro, y la miro… Y no hay forma. No logro saturarme.

Le pongo mil Juanpablos y ni siquiera le pregunto si la vio o no, ya que de recibir una respuesta negativa conseguiré ponerme bastante loco, como el pequeño Gomer, así que mejor no me diga nada y alquílela. No tiene nada mejor que hacer este fin de año.

The 33 (2015)

Con: Antonio Banderas, Rodrigo Santoro, Juliette Binoche, James Brolin, Lou Diamond Phillips, Mario Casas, Jacob Vargas, Adriana Barraza y un montón más

Dirección: Patricia Riggen

La liviandad y la falta de compromiso de EEUU a la hora de describir culturas latinoamericanas es tan apabullante que lo deja a uno sin ganas de padecer un film que de por sí ya se advierte regular contando lo que cuenta  y encarado como de costumbre (a los apurones y a facturar).

Indigna la primera escena en donde EEUU nos pinta la situación económica de los 33 mineros que luego quedarían sepultados, no hay nada más accesible para un director de films de bajas pretensiones que montar una reunión a lo “barbacoa” (se ve que no conocen otra forma de redondear una historia) en donde cada uno, en 15 segundos, pueda explicar su situación financiera, lo que tiene que comprar, lo que debe o lo que le gustaría tener para que uno exclame: “Claro, pobre gente”.

Luego el film solo se supera en la tontería y en abrazar la descripción cronológica sin demasiadas luces con un grupo de actores que hablan en inglés (raro, son mineros chilenos y la gran mayoría no tiene demasiada educación pero hablan perfecto inglés), con un Antonio Banderas que lidera la payasada acompañado por Lou Diamnod Phillips, quien está más viejo que no sé qué.

Y si a esto le agregásemos que las escenas que involucran al gobierno de Chile dejan a éste como una administración a la que verdaderamente le chupa un soberano huevo si se mueren o no se mueren pero harían la excepción de intentar quitarlos de ahí abajo solo para quedar bien con el ministro de minería que de minería no sabe mucho pero tiene un gran corazón y con la opinión pública (si Piñera realmente tuvo esa actitud descripta en el film…, vergüenza ajena debería darle), la verdad es que “The 33” es una cagada por donde se la mire.

Al menos puede haber servido en eso de generar dinero para estos 33 pobres hombres que tuvieron que pasar una espantosa temporada a 500 metros de profundidad y que lograron mantenerse con vida a pesar de los imponderables, del gobierno y de la compañía para la que trabajaban (la cual no fue multada ni cerrada) y hoy, ya pasados 5 años, deben recordarlo como algo que los unió y no se los va a quitar nadie, ni siquiera este film de cuarta.

Le pongo 3 Juanpablos

Freetown (2015)

Con: Henry Adofo, Michael Attram, Alphonse Menyo, Phillip Adekunle Michael, Clement Amegayie, Great Ejiro, Nuong Faalong, Bill Myers y elenco

Dirección: Garrett Batty

No. Inmersa en un real bodrio sin igual, Freetown cuenta la dramática historia de un pueblo africano diezmado por las religiones y los levantamientos y las peleas entre tribus mientras de manera –al principio tontamente disfrazada y de inmediato develada la intención- bastante didáctica y explícita nos muestra cómo aquellos africanos que se alejaron de las tribus revolucionarias o de intentar enganchar un corrupto mango en la política y se abrazaron con fiereza a la palabra de Dios, pudieron ser muy educados, libres, buenos, limpios y usar camisas con corbata.

Y la verdad es que este tipo de tramas ocultas pro iglesia me eyectan del sillón de la misma forma en que lo hace un film de Irak de bajo presupuesto en donde nos cuentan la triste historia de un pseudo héroe yankie que voló por el aire en una nube de flujos sanguinolentos a manos de un malvado terrorista que solo estaba defendiendo su hogar.

Así que no va ni medio Juanpablo para Freetown, lo único que falta es que se haya puesto interesante 20 segundos después que la apagué y después se la agarren conmigo.

Lo dejo con la inquietud.

The Walk (2015)

Con: Joseph Gordon-Levitt, Charlotte Le Bon, Ben Kingsley, César Domboy y elenco

Dirección: Roberto Zemeckis

Mi total y absoluta incapacidad por soportar aunque más no sea a sabiendas de que lo que estoy viendo no es cierto–e incluso con los bobos efectos especiales del film que no son la gran cosa-, imágenes de gente al borde de un precipicio o filmaciones de tipos que se tiran con paracaídas y a los gritos de los edificios más altos del mundo me genera un inevitable y repentino estrujamiento de huevos y calambres de toda índole (sufro vértigo a las alturas desmedidas), The Walk consiguió sin demasiado sacrificio mantenerme con los huevos por completo estrujados haciendo contorsiones pelotudísimas tirado en el piso con mi cuerpo en desacuerdo con la idea de continuar viendo el film.

Ojo, esto para nada significa que la película sea buena, más pelotuda no podrían haberla concebido.

Fofísima, mal contada y tontamente diseñada, The Walk nos dibuja la historia real de Philippe Petit, un desquiciado mental francés que un día vio en una revista que se estaban construyendo los edificios más altos del mundo y se dijo: “tengo que viajar a Norteamérica, unirlos con un cable de equilibrista y caminar ahí arriba sin protección alguna”.

Interesante contemplar cómo era el mundo en 1973 y qué fácil se podía acceder a cometer estas locuras de jovencito descocado con una mínima posibilidad de éxito. Hoy las Torres Gemelas no están más, pero si alguien osara en EEUU entrar de incógnito a un par de edificios altos para unirlos con un cable por la noche y así cometer el “delito” por la mañana terminaría con la cabeza reventada a balazos antes que los oficiales pudiesen abrir los bolsos y encontrar dentro no bombas sino cables de acero y zapatillas de equilibrista.

Así que no sé qué decirle, debe verla porque es una interesante historia real, y la verdad es que la escena final que muestra cómo fue el acontecimiento lo dejará pasmado y con ganas de viajar a EEUU para cagar a patadas en el culo a este francesito cabeza fresca, pero el film y las formas dejan bastante que desear.

Le pongo 5 Juanpablos

Snowpiercer (2013)

Con:  Chris Evans, Jamie Bell, Tilda Swinton, Kang-ho Song, Ed Harris, John Hurt, Octavia Spencer, Ewen Bremner, Ah-sung Ko, Alison Pill y un montón más

Dirección: Joon Ho Bong

Extraño film de  Joon Ho Bong que reúne las más contrastantes estrellas de Hollywood en una historia demasiado fantasiosa e improbable sobre un tren rompenieves del futuro que debe mantenerse en constante movimiento para conservar la temperatura interior ya que el mundo se congeló de pronto cuando la humanidad intentó revertir el calentamiento global y se le fue la mano y todos murieron a excepción de quienes lograron acceder a este absurdo tren y ahora deben padecer las reglas del motorman dueño del convoy quien designó roles dependiendo el vagón que le tocara al pasaje  para edificar así una sociedad piramidal que a él debe rendir cuenta y homenaje.

No es mala, tampoco buena. No es esas películas que uno ve y dice “guau, qué buena idea”, pero hay que reconocerle originalidad. Y el variopinto desfile de actores y actrices que nada tienen que ver unos con otros nos deja por demás de encandilados porque si usted me decía que llegaría el día en que vería a Tilda Swinton en el mismo film en donde colaborara Chris Evans, le decía que estaba loco, lo mismo con Ed Harris y Octavia Spencer. Actores de pacotilla y supremos juntos por un bien común. Raro.

Y eso es todo lo que puedo señalarles de Snowpiercer, un film que deben ver relajados y sin demasiadas expectativas para poder disfrutarlo mejor.

Le pongo 6 Juanpablos  

Auch Zwerge haben klein angefangen (1970)

Con: Helmut Döring, Paul Glauer, Gisela Hertwig, Hertel Minkner, Gertrud y Alfredo Piccini, Marianne y Brigitte Saar, Gerd Gickel, Erna Gschwendtner, Gerhard Maerz, Erna Smollarz, Lajos Zsarnoczay y Pepi Hermine

Dirección: Werner Herzog

Cuando vi por primera vez “Even Dwarfs Started Small” (Incluso los Enanos Comenzaron Pequeños) me di cuenta de que, en lo que cine se refería, aún no había visto un carajo.

Inquietante película de Werner que me dejó perplejo, porque hay que hacer esta película y salir bien parado.

Si pretendo que usted experimente lo mismo que me pasó a mí no debo siquiera dar muchos más detalles de qué va la trama, así que lo mejor es que la vea, y después me cuenta.

Una película muy difícil de conseguir, así que a esforzarse.

Le pongo cientos de Juanpablos.

Werner Herzog está mucho más loco que Klaus Kinski, pero por lejos.

Es más, Klaus Kinski, al lado de Werner Herzog, es la señora Nilda de Siemienczuk .

Kiseijuu (2014)

Con: Shôta Sometani, Eri Fukatsu, Ai Hashimoto, Kazuki Kitamura, Masahiro Higashide, Tadanobu Asano, Miko Yoki, Jun Kunimura y elenco

Dirección: Takashi Yamazaki

Bien. Genial adaptación del delirante manga de Hitoshi Iwaaki.

Buenos efectos, discretas actuaciones y el film nos lleva de la mano con firmeza hasta el final.

Kiseijuu (o Parasyte, para los amigos) es una película ideal para aquellos que suponían que los X-Men eran copados.

Que los X-Men la fumen en pipa.

Le pongo 7 Juanpablos

99 Homes (2015)

Con: Andrew Garfield, Michael Shannon, Laura Dern, Tim Guinee, Noah Lomax y Clancy “Don Cangrejo” Brown

Dirección: Ramin Bahrani

Si no fuera por las irremediables y odiosas estructuras premoldeadas de las que con pesada rutina siempre se sirve Hollywood para construir historias que merecerían otro tipo de enfoque más libre e imprevisible –palabra que ni siquiera tienen en el diccionario-, 99 Homes sería una cruda película que cuenta una historia moneda corriente de EEUU en donde el sueño americano se puede transformar de un día para el otro en una simple pesadilla donde los malos ganan sin siquiera poder hacerles frente un maldito round.

Es explícita en ese sentido y describe casi a la perfección cómo EEUU descuida por completo a sus ciudadanos de los embates de los bancos y las hipotecas que de pronto y tras un martillazo judicial vienen y te sacan de tu casa ese mismo día en donde pensabas ir a trabajar y a la tarde quizás cortar el pasto pero tendrás que, al grito de “estás usurpando una propiedad privada” cargar en el auto lo indispensable como quien escapase de una invasión extraterrestre y deberás dejar un pariente a que cuide tus muebles tirados en la calle mientras conseguís dónde dejarlos dentro de las 24 horas de plazo que te dio el abogado del banco antes que te tiren todo en el contenedor de basura.

Y ese punto está bien descripto, pero la trama, la resolución de las situaciones y la prosperidad inmediata que se consigue está contada de la misma forma que las últimas 78 mil películas que se hicieron al respecto, y eso ya pudre como loco y desfigura buenas actuaciones que hubiesen merecido otro trato más cuidado.

Así que van solo 5 Juanpablos para una película que tiene dos o tres momentos mágicos (cuando Shanon hace poner a Garfield en sus zapatos está muy bien, Dern está exquisita en su propio desalojo y hay situaciones que realmente golpean y están muy bien logradas) pero que se desdibuja con sus defectos de siempre.

A Very Murray Christmas (2015)

Con: Bill Murray y un montón de amigos tan conocidos como él mismo

Dirección: Sofia Coppola

No, embole total. No sé qué pretendieron la hija de Coppola y Murray con esta súper huevada demasiado yankie que despliega con ternura y tesón todo lo que implica la navidad norteamericana propiamente dicha con sus crípticos códigos y sus apátridas costumbres.

La verdad es que uno entra como un gil porque la cara de Murray bien podría vender viejos soretes de perro contaminados que uno va y los compra gustoso, y si a eso le agregamos que el film está dirigido por la bellísima hija (Dios mío , qué linda es Sofía…) de uno de los grandes directores que ha dado el cine quien, además, ya demostró que es astilla del mismo palo con varios films muy bien resueltos, uno no puede más que ponerse a verla como un iluso boludo y le da una oportunidad, sobre todo por el desfile inesperado de todo tipo de actores de renombre que pintan por el set dos o tres minutos arengando al espectador a que no debe perderse este film que acaba de comenzar, pero no, nada que ver con lo que cualquier humano no nacido en Norteamérica esperaría ver de una película con Bill Murray que habla sobre la navidad en Estados Unidos.

Seguramente los hijos de Donald Trump se pasaron un lindo momento disfrutando sus disparatadas ocurrencias mientras se embocaban malvaviscos y desparramaban insípidas botellitas de cerveza Miller en la mesa ratona, pero a mí no me hizo ni siquiera levantar, aunque más no sea, un poquito un lado de la comisura de la boca.

Bodrio total.

Le pongo 2 Juanpablos

Spectre 007 (2015)

Con: Daniel Craig, Christoph Waltz, Léa Seydoux, Ralph Fiennes, Monica Bellucci (¿para qué?), Ben Whishaw, Naomie Harris, Dave Bautista, Andrew Scott, Rory Kinnear y elenco

Dirección: Sam Mendes

Debo hacer un honorable mea culpa ante una crítica que hice a este actor de trompita sexy quien semanas atrás manifestara que ni mamado, ni en el más tísico pedo haría otra película de James Bond, antes se mataría, consiguiendo mi indignación porque si tanto le molestaba hacer ese papel o si tan actor bisagra que no debería actuar en peliculitas de tiros y minas se cree que es no hubiese firmado el contrato, y al ver esta basura totalmente evitable y habiendo sido testigo del cambio que había traído Craig a la historia dándole un toque un poco más oscuro y serio evolucionando al agente inglés, claramente al tipo no le quedó otra que protagonizar esta tontísima secuela por haber firmado contrato pero estaba muy lejos de lo que pretendía y no pudo más que aceptar por ley.

Si tuviese que elegir James Bonds de todas las épocas, siempre me quedaré con Sean Connery, más allá de las carencias de contenidos y las tontas historias que llevaba en el asiento del acompañante de su impactante Aston Martin, fuera de toda crítica, fue el mejor.

Y si tuviese que elegir el peor James Bond, el más pelotudo digamos, el que marcó una época para el olvido en donde sí había herramientas para evolucionar las tramas y engrandecer a un personaje tan querido por tanta gente, ese James Bond sin duda alguna es Roger Moore, dueño de una carencia total de cualquier atributo que James Bond necesita. Pelotudo tremendo, espantoso actor y recontra malísimas historias que si alguien hoy decidiese sentarse a ver una de ellas no llegaría a los 10 minutos de film que se levantaría del sillón con vergüenza ajena.

Me pasé todo el film no pudiendo creer que hayan conseguido volver a ese pasado, qué quiere que le diga. Daniel Craig corre para todos lados como si fuese Roger Moore e incluso por momentos es aún más ridículo, la historia es tremendamente rogermooreana y las herramientas utilizadas son casi las mismas. Y el malo… Siempre dije que no había que darle tanto crédito a Christoph Waltz, que bien había hecho sus dos o tres primeros papeles pero que tampoco daba para tanto y que pronto mostraría que no tiene mucho más para dar que lo que ya mostró (¿2 Oscars?, dios mío).

No podría elegir con objetividad, qué fue peor en Spectre, si la boludísima historia o el inofensivamente boludo malo que le clavaron.

Para publicar esta falta de respeto a James Bond hubiesen rematado la historia en Skyfall, sin dudas esto no hacía falta para nada.

Te pido disculpas una vez más, Daniel, cuando saliste con ese comentario no imaginaba por dónde ibas. Lamento mucho que hayas pasado este mal trago. La trompita esa que hacés todo el tiempo lo merece, pero vos claramente no.

Le pongo 2 Juanpablos.

Waking Ned Devine (1998)

Con: Ian Bannen, David Kelly, Fionnula Flanagan, Susan Lynch, James Nesbitt, Paul Vaughan, Adrian Robinson, Maura O'Malley, Robert Hickey, Paddy Ward, James Ryland, Fintan McKeown y Eileen Dromey

Dirección: Kirk Jones

Genial película de Jones. Amé “Waking Ned Devine” desde el preciso instante en que comencé a verla.

No tiene desperdicio. Gran idea. Geniales actuaciones de Kelly, Bannen, Flanagan y Dromey, pero sobre todo de Kelly y Dromey.

Muy buena película. Si no la vio, no sabe lo que se perdió. Y lo mejor en estos casos, así, digo, como para conocer qué es lo que se perdió, es ir y alquilarla y verla, porque de lo contrario se la va a seguir perdiendo.

Le pongo cientos de Juanpablos.