lunes, 31 de marzo de 2014

“Homefront” (2013)






Con: Jason Statham, James Franco, Izabela Vidovic, Kate Bosworth, Don Cangrejo, Winona Ryder, Frank Grillo, Pruitt Taylor Vince (70 segundos) y gran elenco


Dirección: Gary Fleder (aunque escrita por mi primo)


Resulta que Jason Statham es un temerario policía encubierto de largo pelo y tupida barba infiltrado en una temible banda narco que caerá en sus garras en los próximos dos minutos.

Entonces Narco, quien quiere a Jason como si fuese su propio hijo dándole celos al suyo propio, acepta el consejo de Statham de llevar la droga en tres motos en lugar de en dos taxis como había señalado Narquito, su hijo y heredero del ilegal negocio, sangre de su sangre, astilla de su propia madera. Y este trato que Statham recibe de su padre enoja mucho al joven, quién ya no soporta ni a Statham ni al cariño que su padre siente por él. Y para colmo de males, cuando salen a llevar la droga ¡Zas!, la policía está en las puertas de la fábrica de cocaína ¡Corramos! (¿ninguno de los secuaces de la temible banda narco notó que el predio estaba rodeado de autos de policía o este tipo de situaciones sólo ocurren en la mente de un inocente creador de scripts de medio pelo?)

Narco y Narquito suben a un viejo y poderoso Impala verde y rajan del lugar como cabaret en quiebra y la policía los persigue, junto con Statham, quien elige una mítica Harley-Davidson (las Harleys no están buenas para perseguir narcos, son muy pesadas y no doblan, según un amigo mío, lo mejor en estos casos es una buena moto japonesa de las pisteras) y se les pega en el paragolpe trasero. Narquito le grita a su padre que todo esto seguro es por culpa de Statham, que él siempre supo que era un policía infiltrado. Narco desecha la idea y siguen escapando pero tumban, se golpean y la policía los acorrala. Narco queda perplejo y con escoriaciones varias en el suelo mientras Statham lo esposa por la espalda y Narquito sale de su auto todo ensangrentado mirando a su padre con cara de “¿viste que te dije que éste era un buchón?” e intenta sacar un arma. Statham pide a sus compañeros que no disparen y advierte a Narquito que no lo haga, apuntándolo a la rodilla. Narquito insiste y Statham lo pone en la articulación, ya no volverá a bailar. Pero esto no amedrenta a Narquito, quien ya se imagina preso por largo rato y, haciendo una tierna cara de despedida a su padre, vuelve a buscar su arma en la chaqueta al momento en que recibe una catarata de balas en el pecho, y muere.

Dolor. Sorpresa. Venganza en puerta. 

Narco es enviado a un penal y Statham cambia su apellido, se afeita y corta su pelo al ras, y se muda bien lejos con su pequeña hija. Como en casi todas las películas de este peladito, Statham es viudo o debe encargarse en soledad de un pequeño retoño o retoña. Y una vez mudados de condado, disfrutan de una espléndida vida plena de esmero, sol radiante, trabajos de carpintero y gorritas de baseball, y todo fluye con normalidad y americanismo hasta que Pequeña Retoña da un soplamocos a un sonso gordo en el colegio que estuvo molestándola de la misma exacta manera en que han molestado todos los niños que practican bullying en Norteamérica, que es quitándole la gorra de un cachetazo en la visera y arengando a sus compinches a reír socarronamente de su víctima para luego manifestarle que si quiere la gorra de nuevo, deberá pagar por ella o quitársela por la fuerza. Esto enfurece a la niña, quien le da una tunda para que tenga y guarde y la sexy maestra cita a los padres a una reunión con el solo fin de enamorarse perdidamente de Statham.

Y todo no hubiese pasado a mayores si el gordito abusivo no hubiese sido sobrino del narco del pueblo, quien recibe el pedido de su hermana para que “haga justicia” y le dé su merecido a Statham por tener una hija tan buscona (le prometo que así es). Así que Nuevo Narco, compuesto por James Franco, se da una vuelta por la casa de Statham y descubre con pavor que este pelado corpulento no es otro que el otrora pelilargo y barbudo corpulento culpable de la muerte de Narquito, el hijo de Narco preso, tan pero tan amigo de Franco Narco.

Sorpresa. Indignación. Inusitada y exageradísima sed de venganza.

Franco, perplejo, llama a su amiga Winona Ryder, quien es el nexo entre él y Narco Preso, y le dice que esta es su oportunidad para no sé qué, que le cuente a Narco Preso a quién tienen viviendo en el pueblo y que le deje bien claro que, si lo matan, no sé qué otra cosa.

Así es entonces que, una vez obtenido el obvio visto bueno de Narco Preso, todos los narcos del sur de EEUU se unen en una cálida noche de verano con el fin de azotar hasta el mismísimo delirio a Statham y su pequeña retoña, pero no contaban con la destreza física de Jason ni con sus implacables puños, y terminan todos muertos y triunfa el bien.

Suerte que Statham se las tuvo que ver con dos narcos de pacotilla que no mataban y vengaban como los verdaderos que vemos día a día en los diarios, que cortan en pedacitos a sus enemigos y los mandan luego a sus familiares en cajas de cartón húmedas de sangre, que si no, ¡nos hubiésemos quedado sin Jason Statham para la próxima tontería!

Realmente, me pregunto, ¿Sylvester Stallone no lee los diarios, no guglea al menos sobre el tema que lo decidió sentarse a escribir una trama? O quizás en EEUU no saben lo que ocurre en México con el Chapo Guzmán o en rosario con el Pájaro Cantero. Quien sabe sea hora de que Stallone ponga en imágenes del google “muertos por narcotráfico”, para tener un bosquejo más cercano de lo que los narcos de veras están dispuestos a hacer cuando descubren un impostor o un infiltrado.

Absurda, ilusa, inocente e incalificable.


Me da pena por Don Cangrejo, que me cae tan simpático. El resto, inclusive Franco, se puede ir bien a los recalcados genitales de sus respectivas madres.

viernes, 28 de marzo de 2014

We Are What We Are (2013)





Estreno de la Semana

Con: Julia Garner, Ambyr Childers, Bill Sage, el genial Michael Parks, Kelly McGillis, Wyatt Russell y gran elenco

Dirección: Jim Mickle


Bien, muy bien. A esta altura de la vida, encontrar una película donde trabaje Michael Parks es una bendición, una caricia al alma. Qué gran actor resultó ser. Qué bien que rellena espacios. Un grande que no es tenido en cuenta. Viva Michael Parks.

Y la película está muy bien. Ojo, es una película chiquita sin grandes pretensiones, pero está bien rumbeada, bien resuelta. Un lujo.

Así que no tengo nada más que decirle, si usted gusta del cine de terror repugnantón hasta ahí, o al menos si se banca ciertas cosas (nada que ver con El Juego del Miedo, guarda que no hablo de eso, aquel que filmó aquello es un descerebrado asqueroso, me refiero a la repugnancia sutil, no a la explícita), es una buena opción para este finde.

Le pongo 7 Juanpablos y todo, mire lo que le digo.






jueves, 27 de marzo de 2014

Dallas Buyers Club (2013)





Sí, está bien. Es una buena película.

Por supuesto que no me parecen dignos de “Oscars” McConaughey y Leto. McConaughey está muy bien, muy compenetrado y todo, pero jamás me hizo estallar una lágrima o aunque sea pucherear un poco o sentir en carne propia lo que le sucede, qué sé yo… Hace bien su papel, pero no me parece que fuera para tanto. Habrá que ver cómo lo han hecho los otros nominados en sus respectivas películas para medir el verdadero mérito que tiene. Hasta ahora sólo vi a Chiwetel Ejiofor en "12 years a slave" -y me pareció demasiado fofo y alejado de cualquier galardón- y a Dern en "Nebraska", y me quedo con Dern, por lejos...

Y lo mismo me pasó con Leto, no da para Oscar eso que hizo, la verdad que no entiendo mucho el tema de los galardones de la academia. O sea, sí que lo entiendo, no entiendo cómo puede haber tanta gente que se guíe por estos premios acomodados y no decida por cuenta propia quién superó las expectativas y quién no.

Quizás haya calado hondo en el público la relación entre el “súper macho men” de McConaughey y el transexual de Leto que al principio se rechazan por sus contrastantes condiciones sexuales y luego la vida los une y se hacen amigos, pero eso ya fue contado de manera magistral por Philip Seymour Hoffman y Robert De Niro en "Flauless", una película chiquita y medio sonsa que tiene quizás como única virtud el talento de mostrarnos cómo un tipo recontra heterosexual que jamás toleró homosexuales ni siquiera para mirarlos o pasarle cerca debe aceptar, por una situación límite que atraviesa, relacionarse con uno de ellos y entonces luego las distintas vicisitudes que atraviesan los une más y más en una relación de amistad que solo podría quebrarse con la propia muerte.

Y eso es todo lo que tengo para decir de "Dallas Buyers Club", una película buena, bien contada y llevadera que quizás tiene muchos más galardones que los que realmente merece. Aunque esto no quite que haya que verla.

Le pongo 7 Juanpablos.

miércoles, 26 de marzo de 2014

Chained (2012)





Con: Vincent D’onofrio, Eamon Farren, Evan Bird, Julia Ormond, Conor Leslie, Jake Weber y gran elenco

Dirección: Jennyfer Lynch


Está bien. La hija de David Lynch vuelve al ataque con sus locuras en una película a la que le falta un poquito para ser buena en serio, que tiene unas tomas exquisitas y unas escenas formidables, que muestra una situación de secuestro y violación que generalmente vemos ocurrir en lugares oscuros, chorreantes de líquido y suciedad y acá no. La locación es una simple casa iluminada como cualquier simple casa que no necesita ayudarse con oscuridad y relámpagos para obtener en el espectador una buena fruncida de ojete, y eso es muy meritorio, y lo aplaudo.

Luego D’onofrio tiene sus momentos buenos y sus momentos malos. Ahí hay algunos errores evitables que son aquellos que la tiran un toque para abajo. Pero buena película. Ideal para esos días en que anda con ganas de verse una de asesinos seriales y ya vio todo lo que hay dando vueltas. No es Surveillance, pero es aceptable.


Le pongo 6 Juanpablos.





martes, 25 de marzo de 2014

Vehicle 19 (2013)





Con: Paul Walker y Naima McLean

Dirección: Mukunda Michael Dewil


Ver ésta película calentita, humeante y recién sacada del horno luego de la muerte de Paul Walker me hizo recordar al disco que sacó Callejeros a los resantos pedos luego de la masacre de Cromañón para poder vender y vender copias aprovechando el fabuloso viento en popa que tenían en aquel entonces.

Ni siquiera debería haberla alquilado, debería haberlo sabido siendo como soy un tipo grande que vería una película no del todo terminada, bastante torpe y falta de argumento razonable.

Dejen tranquilo a Paul Walker.




lunes, 24 de marzo de 2014

The Terror Experiment (2010)






Con: Jason London, C. Thomas Howell, Jerry Leggio, Alexander Mendeluk, Robert Carradine, Lochlyn Munro, Arielle Stephens, el invalorable aporte de Zachariah Jay, Alicia Leigh Willis, el olvidadísimo Judd Nelson y gran elenco

Dirección: George Mendeluk


Resulta que Cale, un experto mal actor que hace de ingeniero en computación, debe acudir a un edificio federal a hacerse el que escribe en un teclado frente a unas computadoras que lanzan montones de datos irrelevantes para hacer ver que ojo, guarda con estos archivos que están corriendo súper rápido por la pantalla, que son muy importantes.

Cale tiene una dulce hijita y es separado, así que como no puede quedarse sola en casa la lleva con él y la deja en el pelotero del edificio federal al cuidado de una niñera -cuando la niña ya es una preadolescente de entre diez y doce años a pesar de estar aferrada a un osito como si tuviera cuatro, pero usted tampoco sea tan ortiva, que si no consiguieron una nena más chica no fue culpa de ellos-. Quizás deberían haberla dejado en una oficina desocupada para que jugase con su Tablet, siendo ya tan mayor como es, pero se ve que en el libreto decía “niñita aferrada a oso de peluche” y el director es un tipo muy de seguir a rajatabla lo que le dicen.

Mientras tanto, en otras oficinas de máximo y supremo alto mando, un gordo que usted no imagina lo mal que compone su papel de “director de sección”, tiene una entrevista laboral con una rubia bastante veterana y le dice, con gran cara de torpe y al estilo Jorge Lanata, que ellos “híper recontra chequean todo”, amenazando a Rubia con que no le será tan fácil obtener el empleo por el que se presentó en su despacho, y continúa: “La perfección, ante todo”, montando una innecesaria escena que exagera una condición que ni siquiera existe en la película (eso de híper recontra chequear todo y tener como prioridad antes que cualquier cosa la perfección o la excelencia ya que la película aún no alcanzó los diez minutos y ha demostrado con creces ser una de las más necias, estúpidas, colmadas de errores y de falta total y absoluta de revisión de las que he visto en mucho tiempo).

Por otra parte, en los laboratorios de extrema seguridad del edificio federal, un joven mal actor se hace pasar por cadete de una empresa de delivery y entra como Pancho por su casa por el edificio federal tan pero tan críptico con una caja y un globo rojo con el fin de perpetrar un atentado terrorista. Y no solo consigue pasar la puerta de ingreso tan infranqueable, también logra acceder al medio mismo del laboratorio de investigación ultra secreta hasta que finalmente uno de los extras que hace de “científico que va y viene con tubos de ensayo” nota que hay alguien que no es de ahí y le dice: “Eh, tú. ¿Qué haces aquí?” al momento en que el joven, recién rociado por un asistente para demostrar nerviosismo y transpiración, aprieta un botoncito de su caja activando su artilugio terrorista mientras el director del film hace una toma exterior del edificio, que se estremece con una onda expansiva re berreta y no se le rompe ni un solo vidrio.

Todos corren, gritan y bajan escaleras. Esto último está bien documentado por nuestro director, que hace tomas de pies que van para allá y vienen para acá sin criterio alguno y corriendo bastante despacito a pesar de la desesperación que quieren bosquejar, cuando de pronto una nube amarilla llena de extrañas toxicidades todo lo envuelve infectando a los malos actores que actúan la escena con desparpajo.

Y de a poco comienzan a sentir los síntomas, exactamente iguales a los de War World Z aunque sin siquiera un mínimo de respeto y se empiezan a morfar entre ellos pero, en contraste con la película de Brad Pitt, estos zombies dan menos miedo que el Topo Gigio vestido con su ropa de cama.

Así es que Cale está meta tipear boludeces en su computadora y de pronto una sirena (una chicharra, una alarma, no una mujer pescado) y una voz en off le advierten que hubo un accidente y deberá quedarse en su oficina hasta que lleguen las autoridades pertinentes. Esto asusta a nuestro protagonista, quien de inmediato piensa en su dulce y no tan pequeña hijita y corre en su búsqueda, pero al llegar a la puerta de las escaleras se encuentra con un grupo de malos actores que conducirán junto a él esta maravillosa mala película comprendidos por el gordo que todo lo recontra híper chequea excepto su torcida corbata, una mulata que, creo, en toda la película no dice más de siete palabras, un jovencito apuesto, la rubia baqueteada, un marine y un doctor que escapó del laboratorio con tan buena fortuna que no se ha contagiado la terrible enfermedad y de inmediato comienza extrañamente a contar lo que sucedió con lujo de detalles, él sabe perfectamente que entró un terrorista e hizo explotar una nube de un nuevo material tóxico que ellos mismos estaban produciendo para que los enemigos se contagien y coman entre sí sin que EEUU deba disparar un solo tiro, a lo que Cale le pregunta cómo hizo para poder escapar (yo también me lo pregunto), y el hombre responde que justo estaba en el baño (¡!) para continuar de inmediato con su discurso ordenándole a sus compañeros de film que no vayan a osar bajar por las escaleras, que hay que esperar que el gas tóxico se transforme en polvo y luego sí podrán bajar a buscar el antídoto a la caja fuerte del lab (como en War World Z, igual, igual). Cale insiste en bajar, teme por su no tan pequeña dulce hijita, pero Doctor no se lo permite, desecha su oferta e invita a todos a pasar a una sala de conferencias donde poder esperar esas cuatro horas que faltan para que el peligro cese.

Luego, fuera del building, un olvidadísimo y ninguneado C. Thomas Howell quien en los ochenta tuvo a Hollywood en sus manos participando en E.T. phone home, compone el patriota papel del jefe de policía del condado, quien debe resolver el intríngulis desde la calle y manda a cuatro SWATs para allá y luego a los mismos cuatro SWATs para acá (no tenían tanto dinero para montar una escena del estilo Terminator II donde el despliegue policial era imponente, esto que estamos viendo es bien carente de extras, dinero y cosas de esas) cuando de pronto y mientras continua señalando puntos cardinales con el coraje que todo jefe de policía necesita, aparece por el lugar otro importante y súper cajoneado olvido ochentoso como es Judd Nelson, el otrora carilindo y rebelde adolescente que quedare atrapado en su escuela un fin de semana completo en Brakfast Club, quien pone de un tiro a un Teletubbie que justo viene corriendo de adentro del building ataviado con esos trajes anticontagio que no fueron lo suficientemente “anticontagiantes” y le dice a E.T pone home que ahora él está a cargo.

Así es entonces que comienza a fluir esta desesperante película en donde era tan pero tan sencillo esperar un toque a que el gas se hiciese polvo y así bajar todos de la mano pero los diversos protagonistas, seguramente influenciados por el director, deciden bajar antes, pelearse con los zombies y morir mientras Cale y Rubia descienden por otro lado en busca de su dulce y no tan pequeña hija y al llegar al pelotero encuentran a la niñera muerta y a la ex mujer de Cale convertida en zombie, quien intenta morfarse a su ex marido aunque de pronto lo reconoce y Cale se da cuenta de esto y le pregunta por la dulce y no tan pequeña hija de ambos y su ex, lejos de comportarse como un verdadero zombie hecho y derecho, un zombie de ley, le cuenta que la niña logró salir con vida, pero con voz de zombie, así: “Nooohh, tehhh, preocuuuupeeees, eeeeellaaaaaaa logroooooó saaaahhhaaaliiir cooon viiidaaaaaahhhhgggg”, y luego le tira un tarascón y recibe un disparo de Rubia, quien la mata y se abraza a Cale y luego bajan y salen del edificio siendo los únicos sobrevivientes, un minuto antes de que las autoridades pertinentes compuestas por el viejo y olvidado Breakfast Club apretare el botón y dinamitare el edificio, que caerá de la manera más pedorra que usted haya visto mientras la película termina y enfoca a E.T pone home que atiende por celular a su esposa y le dice, entre llantos (seguramente reales sabiéndose partícipe de esta huevada), que la ama.

Hacía rato que no veía algo así, tan impactantemente malísimo. Un lujo, la verdad. Me sorprendió.


Como película mala, le pongo 10 Juanpablos. Gran película mala.

viernes, 21 de marzo de 2014

The Way Way Back (2013)





Estreno de la Semana


Con: Steve Carell, Toni Collette, Liam James, Sam Rockwell, AnnaSophia Robb, Allison Janney, Rob Corddry, Amanda Peet, el mismísimo Nat Faxon y gran elenco

Dirección: Nat Faxon y Jim Rash



Bien, buena película de Faxon y Rash. Excelente actuación de Liam James.

Steve Carell acompaña sin desentonar (está al borde, ya comienza a repetirse y repetirse y repetirse…) mientras Collette compone lo mismo de siempre y Rockwell también, así que es muy raro lo que pasa con esta película que habla sobre ese momento tan difícil en la adolescencia en donde uno debe acatar órdenes como un muñequito y ya tiene otro cuerpo y otras expectativas de vida y comienza a saber por cuenta propia lo que está bien o lo que está mal sin necesidad de preguntarle a un adulto.

Muy buena peli.

Le pongo 7 Juanpablos.



jueves, 20 de marzo de 2014

Nebraska (2013)





Con: Bruce Dern, Will Forte, June Squibb, Bob Odenkirk (hermano gemelo de Kevin Costner), Stacey Keach, Tim Driscoll, Davin Ratray y gran elenco

Dirección: Alexander Payne


Bien. Gran película de Payne. Muy bien lograda.

Dern deja la vida en una actuación sublime acompañado con respeto por Forte, Squibb y Odenkirk, quienes no deben resaltar demasiado en una historia muy bien contada en hermoso blanco y negro que muestra con gran talento la vida de un pobre tipo al que nada le salió como esperaba y al que ya nada le importa demasiado.

Hermosa. Ideal para lucir en este blog que hoy cumple 1.000 críticas gracias a todos los que me leen.

Le pongo 8 Juanpablos y lo insto a que la vea y festeje conmigo estas mil –dios santo- críticas de cine.




miércoles, 19 de marzo de 2014

Runner Runner (2013)






Con: Ben Affleck, Justin Timberlake, Gemma Arterton, Anthony Mackie y gran elenco

Dirección: Brad Furman


Encontrar a esta altura de 2014 una película protagonizada por Justin Timberlake es sinónimo de fofosidad, lelismo, sonsería y expeditiva desabritud plena.

Lejos quedó aquella época en donde un renovado Justin dejare atrás su época de cantante fofo, lelo, sonso y desabrido para descollar con su gran participación en Alpha Dog y dejarnos a todos alelados con el contraste entre el Justin cantante y el Timberlake actor.

La vida y el paso del tiempo nos fue demostrando, más o menos rápido, que el tipo es un insípido de ley, un soso de esos que no se guardan nada arremetiendo con su inexpresividad donde sea que vayan. Y eso al menos es meritorio, porque uno sabe de antemano que lo que va a ver es una de esas boludeces cósmicas que no dejan nada de nada, que no tienen explicación alguna y que solo sirven para pasar un rato bien fofo, sumamente lelo, agobiantemente sonso e implacablemente desabrido.

Sorprende Affleck, que ya está para otra cosa y acá se presta a colaborar en esta tontísima historia de gambling cibernético que le queda demasiado chica.

Así que ya lo sabe, amigo lector, si usted gusta de perder el tiempo, alquílela. De lo contrario aproveche y vea otra cosa, que esto no sirve ni para apantallar el carbón y así arrancar un fueguito.

Le pongo 2 Juanpablos, Gemma es muy linda y vale estos puntos.






martes, 18 de marzo de 2014

Gravity (2013)






Con: Sandra Bullock, George Clooney

Dirección: Alfonso Cuarón


Mucho se ha dicho de Gravity sobre la cantidad abusiva de premios de la academia recibidos y que no los merece y que esto y que lo otro, pero hay algunas cuestiones que hay que aceptar:

En primer lugar: Los premios de la academia son premios que la academia da a aquellos galardonados que interesan a la academia.

En segundo lugar: Los premios que ganó (dirección, cinematografía, edición fílmica y de sonido, efectos visuales y música) fueron, en este caso puntual, todos muy bien ganados.

Luego de esto, la crítica:

Está bien, es entretenida, práctica y didáctica.

Gravity exagera una situación que bien podría ocurrir ahí arriba, protagonizada por una Sandra Bullock muy bien puesta, que se nota que ha dejado todo lo que tiene en este rol, acompañada de manera discreta por George Clooney. Y ambos dirigidos por Cuarón, tipo que sabe cómo describir situaciones dantescas como pocos hay hoy por hoy en el mundo del cine.

Así que véala y disfrútela. Póngala bien fuerte. Gravity es una de esas películas ideales para ver en un Led de 40” enchufado a un equipo Technics de los ’90, el Home Theatre tírelo por la ventana.

Le pongo 7 Juanpablos.



lunes, 17 de marzo de 2014

"The Triangle" (2005)





Esta semana El Crítico Cinéfilo, a pesar de que ni usted ni yo podamos creerlo, cumple 1.000 críticas.

Así que aquí tienen a modo de agradecimiento, la primera crítica publicada en el blog sobre una película tan pero tan mala e innecesaria que hiciera que me levantase del sillón y dijera: “Esto es tan malo que debo criticarlo”, construyendo este blog que empezó como un ejercicio para ablandar los dedos y que terminó teniendo adeptos en España, Chile y México, por poner algunos ejemplos, ya que la lista de países sigue, haciendo que realmente no pueda creerlo.

Gracias a todos por leerme y perdón por la crítica que sigue aquí abajo, que seguro está muy mal escrita.


“The Triangle” (2005)


Con Sam Neill, Catherine Bell, Lou Diamond Phillips y otros.


Costo: 22 palos verdes.


Un acaudalado señor (Sam Neill) que comercia con el trasporte de mercaderías en grandes transatlánticos cargueros (tiene miles...) pierde en el oscuro triángulo de las Bermudas a razón de 1 barco por mes...


Ya ahí la cagamos, porque ninguna empresa de trasportes de barcos que cruzan océanos se puede permitir perder un barco de esos por mes sin terminar en la banca rota. 1er error.


Por tal motivo, contrata a los mejores, los mas experimentados y los mas grosos en sus respectivos ramos para que a cambio de 5 palos verdes para cada uno, le expliquen el motivo de las pérdidas en alta mar.


Estos suertudos beneficiarios son:


-Una doctora en oceanología (o como se diga esto) Que, para variar, está muy buena

-Un mentalista, que es famoso por desarticular secuestros con el solo hecho de tocar una prenda del secuestrado y cerrar fuertemente los ojos para concentrarse (tipo Bellini)

-Un loquito de la guerra que hace estupideces en el agua (nada entre tiburones, salta en paracaídas en plena tormenta y esas pavadas que generalmente hacen los yankis)

-Un periodista (el mejor?, el mejor en que?)


La historia comienza inmediatamente con el amerizaje de un avion de línea que se pierde en el fondo del océano y el rescate de una nenita de 6 años que, según el mentalista, se encuentra con vida dentro del baño del avion... (otra idiotez)


Cuando finalmente la rescatan, la nenita es una vieja de 70 años, todo muy loco.


Como este caso puedo contarles varios mas pero no vale la pena, todo es así y a cada uno de ellos, a los 4 fantasticos, les empieza a cambiar su relidad; un día estan de novios con una mina, al otro estan casados y tienen hijos con otra, otro un dia tiene 2 hijos y al otro solo uno y así, todo muy confuso).


Conclusión:


La peli es mala, esta mal dirigida, no tiene claro su objetivo en el mundo y los 22 palos no se en que los gastaron porque los efectos especiales parecen hechos con una commodore-64, sobre todo al final, que Lou Diamond Phillips va al rescate de alguien en una poderosa lancha de Greenpeace y es patético como dibujaron el agua y la lancha, parece un video juego de los baratos.


Este suplicio termina con los 4 nuevos millonarios encontrando la respuesta al intríngulis de las Bermudas... Es el gobierno norteamericano (que original historia!) que esta probando nuevas maneras de cagar al resto del mundo y el proyecto x-mispelotas se les fue de las manos y ahora no lo pueden controlar, todo culmina con un momento de tensión que solo pone tensos a los actores porque a mi no me movió un pelo, en donde el gobierno esta por tirar una bomba en el triángulo para cortar el defasaje de tiempo que se produce y los 4 fantasticos tratan de impedirlo, finalmente, luego de algunos forcejeos lo logran y la pelicula termina con ellos mirando el mar y los miles de aviones y barcos desaparecidos flotando y volando (sin chocarse...) en el triangulo de las Bermudas...


No alquilen esta peli, no gasten plata al pedo.

http://criticocinefilo.blogspot.com.ar/2008/07/triangle-el-tringulo-de-las-bermudas.html


viernes, 14 de marzo de 2014

"The Glass Man" (2013)



Estreno de la Semana



Con: Andy Nyman, James Cosmo, Neve Campbell y escaso elenco

Dirección: Cristian Solimeno


Estreno de la Semana


Bien. Genial. Gran película de Solimeno.

Nyman pone todo de sí para crear a este Martin agobiado por su presente conformando una linda dupla con Cosmo, a quien no veía desde Braveheart, más o menos.

Buena peli, oscura, depresiva. Ideal para esos días en que uno anda pila-pila.

Eso sí, quien sabe no sea la opción más adecuada si usted justo acaba de ser despedido del trabajo o anda re para atrás y al punto de la desesperación con el tema de la guita. Si anda así, lo mejor es agarrar alguna de tetas o de faso, esta déjela para otro momento.

En definitiva, queridos amigos, Hacía mucho que evitaba alquilar The Glass Man por su boluda tapa y su necio título en castellano “Un hombre al límite” (Uau, qué atrapante nombre!, habría que matar al boludo que hace eso), y me equivocaba, está muy bien. Y describe de manera magistral una situación que dos por tres ocurre con la clase social que describe.

Le pongo 8 Juanpablos.





jueves, 13 de marzo de 2014

Ender’s Game (2013)






Con: Harrison Ford, Asa Butterfield, Ben Kingsley, Viola Davis, Abigail Breslin, Nonso Anozie  y montón de jovencitos inocuos

Dirección: Gavin Hood


Mucho tiempo esperé el estreno en DVD de Ender’s Game con el coco comido por mi hija adolescente que me decía todo el tiempo que tenía que ver esa película que era lo más, que era re genial y que no podía estar mejor. Y no, lo lamento mucho por mi hija pero Ender’s Game es otra película sonsa para adolescentes llena de clichés apuntados al adolescente más hormonalmente revolucionado que cuentan una historia de invasiones extraterrestres futuristas donde el ser humano debió preparar una base espacial donde adiestrar jóvenes soldados que deban dar su vida por la madre patria bajo las órdenes de un Harrison Ford que funciona con muy poco, una Viola Davis que exagera su condición de terapeuta contradictoria mientras los niños deben acatar las gritadas órdenes de un tontísimo Sargento Dap al que ordenaron fustigue a sus súbditos con el poder del viejo Sargento Hartman de Full Metal Jacket quedando tan pero tan lejos de poder dibujar ese escenario de “soldado disciplinado por superior” que solo da vergüenza ajena y ganas de ir a buscar a Nonso Anozie (el actor en cuestión), darle una chupeta y mandarlo al rincón en penitencia.

Me da un poco de miedo que nuestros hijos se acostumbren a ver este tipo de películas que no muestran para nada la realidad de las acciones humanas, en donde todo es plástico, lindo, joven y genial, y nada nunca podrá torcer el viaje de sus vidas, porque falta poco tiempo para que comiencen a darse la cabeza contra la pared, y cuando nosotros éramos chicos teníamos acceso a otro tipo de películas, mucho más crudas, directas o expeditivas que nos mostraban la vida tal cual era.

No sé por qué me colgué con todo esto, pero lo dejo con la inquietud.

Le pongo 3 Juanpablos.







miércoles, 12 de marzo de 2014

Corazón de León (2013)






Con: Guillermo Francella, Julieta Díaz, Mauricio Dayub, Jorgelina Aruzzi, Nora Cárpena, Nicolás Francella, María Nela Sinisterra, Claudia Fontán y gran elenco

Dirección: Marcos Carnevale


La verdad que no entiendo qué quiso hacer Francella con esta película. Como tampoco entiendo qué tanta propaganda le hicieron en el momento en que salió en cine. Siempre tuve la corazonada de que era uno de esos bodrios pelotudísimos que protagonizaba Guillermo Francella antes de convertirse en este nuevo Guillermo Francella que hoy conocemos y que tantas alegrías nos ha dado. Y quizás por eso no me animaba a alquilarla, porque temía desilusionarme o no entender qué bosta tiene en la cabeza Guillermo Francella.

Y ¿la verdad? No la soporté. No pudo pasar mucho más allá del momento en que Julieta Díaz, en la primer escena, se da cuenta de que se le está inundando el baño y grita “¡La puta que lo parió!” conformando el primero de una serie de gags gastadísimos que gracias a mi buen criterio me evité ver. Así que la adelanté un poquito, al menos hasta una escena en donde se pueda apreciar el laburo técnico de mostrar a un Francella petiso, corroboré lo bien hecho que estaba, y la saqué.

Me dio vergüenza ajena ver a Guillermo Francella venir de El Secreto de sus Ojos, o de Atraco!, e incluso hasta de “Los Marciano” para llegar sin escalas a esta nueva producción pelotuda de chistes bobos, escenas mal editadas y actuaciones para el olvido de película "graciosa" de la década del 80.

Así que una cagada esta cagada, mejor no la vea, se va a enojar con Guillermo Francella.



No podría ponerle ni un solo Juanpablo.

martes, 11 de marzo de 2014

Thor: The Dark World (2013)






Con: Chris Hemsworth, Natalie Portman, Tom Hiddlestone, Antony Hopkins, Jaimie Alexander, Rene Russo, Stellan Skarsgård, Idris Elba y gran elenco

Dirección: Alan Taylor


Sí, está bien. Es entretenida, por momentos cómica. Todo funciona bien en esta nueva entrega de Marvel.

Hemsworth comienza a caerme simpático y Hiddlestone encontró su lugar en el mundo con su Loki tan querendón.

Luego, la parte crítica, Russo está muy descuidada y Portman se está quedando peligrosamente pelada, pero son detalles ínfimos de una película que entretiene de principio a fin y que fue construida con ese sólo fin, el de hacernos pasar un buen rato viendo a unos vikingos del espacio exterior que viven 5.000 años y que les encanta el dorado, los engranajes gigantescos y los puentes cibernéticos.

Así que le pongo 7 Juanpablos. A donde apuntó, le dio en el centro.




lunes, 10 de marzo de 2014

Escape Plan (2013)






Con: Sylvester Stallone, Arnold Schwarzenegger, Jim Caviezel, Faran Tahir, Amy Ryan, ¡Sam Neill!, ¡¡Vincent D’onofrio!!, Vinnie Jones… y el invalorable aporte actoral de Curtis Jackson, como el implacable e irrelevante “Hush”

Dirección: Mikael Håfström


Resulta que mi primo, que se ve que se aburre con gran facilidad, en esta ocasión se pone en la piel del temerario Ray Breslin, suerte de moderno Houdini de prisiones de máxima seguridad que comete delitos adrede para ingresar en dichos penales y así poder escapar con el fin de visitar, una vez escapado y con su socio D’onofrio, a las empresas que construyen cárceles inviolables de máxima seguridad y mostrarles dónde cometieron el error y cómo pudo escaparse para venderles entonces el kit para armar la cárcel más inviolable del mundo y llenarse de oro.

Y tal es su pericia, profesionalismo, carisma y talento de escapista que escapa sea como sea, que el propio FBI lo contrata para meterlo de prepo en la unión carcelaria más complicada, más zarpada, más inviolable y más inaccesible que usted haya visto y que exista en todo el cosmos. Esta cárcel está construida de una novedosa manera que deja en el pasado y en el olvido más descartable a cualquier otra cárcel inviolable, sea esta cual fuere. Pero para poder recibir el presupuesto del gobierno de los Estados Unidos de América y así poder ponerla en funcionamiento, primero debe pasar la prueba “Ray Breslin de sellado perfecto”, y ¿qué mejor que contratar al viejo escapista para encerrarlo dentro y esperar a que escape o se rinda detrás de los barrotes? Pues nada, así que una bella agente del FBI visita las oficinas de Breslin Escapes & Co. y le ofrece 2,5 millones por el trabajo. Mi primo acepta, contento (yo hubiese agarrado viaje igual, me vendrían muy bien 2,5 millones de dólares en este momento) mientras que su secretaria no queda conforme y su técnico de computación (que es quien siempre asiste a Sylvester desde una locación remota) también denota intranquilidad en su rostro de mal actor que carga con estoicismo Curtis "50 Cents" Jackson sin excusa aparente.

Luego se preparan para el nuevo trabajo, Curtis implanta en el hombro de su jefe un chip con GPS para saber dónde lo llevarán, Sly saluda con un tierno abrazo a su secretaria y a D’onofrio, y parte al centro de New Orleans, meca de toda nueva película mala que se geste luego del huracán Katrina, para esperar a que lo recojan con la combi que lo trasladará a su nuevo destino. Pero dicho vehículo, lejos de ser del estilo Manuel Tienda León y conducido por algún jubilado joven de camisa blanca, corbata y vaqueros gastados, es una camioneta negra, amenazadora e infestada de intimidantes fornidos muchachos que, tapando con cobardía y pasamontañas sus rostros, secuestran al viejo Sly, lo meten dentro de una patada en el culo y de inmediato le tajean el hombro para extirparle el chip que señala su ubicación, aplástandolo contra el suelo de la camioneta y destruyéndolo por completo. Y claramente lo han roto, porque en las oficinas de Stallone, la pantalla de la notebook deja de mostrar el puntito rojo que paseaba las calles del plano de New Orleans con un seco ¡Puchík! (sonido cibernético que hace un chip cuando desaparece aplastado por la culata de un revolver).

Horror. Clamor. Candor. Confusión. Y ahora, quién podrá defenderlo

Esto preocupa en demasía a Secretaria, quien increpa a D’onofrio entrando de prepo en su oficina, reclamándole que ahora no podrán saber nada de Sly y que a él sólo le importa la plata, cosa muy cierta, por cierto, de lo contrario no hubiese aceptado colaborar en esta insensatez.

En eso, la camioneta llega a un puesto en donde cubrirán la cara tuneada de nuestro pariente para subirlo a un helicóptero, sedarlo y así depositarlo en su destino final mientras Secretaria vuelve a la oficina de Curtis y le pregunta si volvió a recibir la señal del puntito rojo, pero Curtis, sin mirarla, le manifiesta que “sigue igual que ayer. No puedo encontrarlo”. La joven insiste con preguntas necias y sin sentido de toda película malísima y le espeta: “¿Hiciste el diagnóstico del sistema?”, y Curtis responde otra obviedad: “2 veces”, a lo que la muchacha, ya presa de la más cruel escena pelotuda del mundo le clava: “Hazlo otra vez(¿Con qué fin, Secretaria? ¡Claramente le han extirpado el chip del hombro!, ¡ustedes fueron testigos de cómo el puntito rojo desapareció para siempre!, ¿para qué seguir dando vueltas sobre algo que no se revertirá?).

Y mientras Curtis y Secretaria pierden tontamente el tiempo para conseguir necesarios minutos de relleno, Sly llega finalmente a la cárcel que deberá auditar y despierta de su sedación. El lugar es hermético como nada que usted haya visto en su vida, un frasco de mermelada La Campagnola cerrado al vacío no está lo suficientemente cerrado al vacío como esta mega cárcel que aún no ha sido aprobada por el Senado pero que, paradojicamente, ya está súper poblada de los más recios, viles y crueles asesinos seriales de todo el planeta, custodiados por docenas de absurdos policías enmascarados que acatan las órdenes de Hobbes, el director carcelario más macabro que usted haya conocido, quien recibe a Sly y le dice que, de ahora en adelante, él le pertenece, y que nada de lo que diga o haga hará que deje de azotarlo, golpearlo y ajusticiarlo por mano propia y la de sus enmascarados súbditos. Sly, confundido y alelado, le dice que espere, que se rescate un toque, que él venía a ver cómo hacer para escaparse de ahí, que el FBI lo mandó para eso. Pero Hobbes no puede siquiera concebir lo que acaba de escuchar y envía a nuestro primo a una celda de penitencia, un cubículo de metal donde el penitente deberá soportar por horas el alumbramiento de unos focos como de cancha de fútbol que iluminan el metro cuadrado del nicho para volverlo loco y darle un color caribeño a su piel.

Sly no puede creer su mala suerte, nunca le agradó la piel tostada y todo ha sido una terrible confusión. Ahora deberá escapar sí o sí del lugar para poder mantenerse con vida, así que aprovecha su estadía en el cajón de la penitencia para advertir unos remaches que bien podrían ser descabezados si alguien le consiguiese un pedazo de metal redondo de tres pulgadas. Así que, al salir y disfrutar de su primer recreo en compañía de montones de presos políticos peligrosísimos, se hace amigo de Arnold Schwarzenegger, uno de los presos peligrosísimos, quien le cuenta que le puede conseguir lo que sea. Esto es medio raro, porque se nota que aquella es una cárcel nunca vista, muy nuevita, de recontramáxima seguridad y que ni siquiera debería aún poseer un stock tan caudaloso de reos. Y el procesado que consigue cosas, en general, es un tipo que hace años está cumpliendo condena en el mismo lugar, ya se conoce todos los yeites del predio e hizo migas con el cocinero, con el portero, con el lavandero y la mar en coche, así que bastante absurdo y pelotudo el rol de “conseguidor de cosas” de Arnold Schwarzenegger.

Sly acepta y le pide el disquito de metal de 3 pulgadas, cosa aún menos accesible para una cárcel en donde ni siquiera hay trabajos comunitarios ni nada de eso, pero Arnold Schwarzenegger misteriosamente se las sabe todas, así que le dice que le dé una piña, que monten una tonta pelea y así poder terminar los dos en el cajón de la penitencia. Rocky lo pone. Los policías caretas los encarcelan.

Días de tortura lumínica más tarde, Arnold vuelve al recreo y se sienta con el viejo Sly como si fuesen grandes amigos ante la mirada necia de los Policías Caretas, que solo fueron contratados para menear unos rifles y no tener ni objetividad ni criterio alguno sobre lo que deben custodiar. Tanto Stallone como Schwarzenegger bien podrían haberse puesto a jugar al elástico como niñitas en medio del playón de recreo y los policías con careta no hubiesen visto esto como algo raro luego de que semanas atrás debieron separarlos entre varios de las piñas que se daban, así que continúan meneando sus rifles con la parsimonia de un zombie mal contratado.

Entonces está todo listo para el segundo paso, Sly ya tiene su disco de metal de tres pulgadas que Arnold encontró justo debajo del escritorio del malvado Hobbes (¿?) y ahora solo resta montar una nueva pelea de recreo para volver al cajón de la penitencia, donde gracias a la potencia descomunal de los focos lumínicos sumada a la destreza de nuestro escapista que con el disquito refleja la luz de los lamparones en las cabezas de los remaches para descabezarlos, conseguiremos un práctico escape por una tubería extrayendo un chapón del suelo.

Experiencia. Maña. Habilidad inusitada. Cárcel no tan inviolable. Viva Rocky.

Y no hay tiempo que perder. Sly recorre los pasadizos del lugar mientras Schwarzenegger grita en alemán un montón de inconveniencias que a cualquier guardia cárcel bien preparado le hubiesen servido para advertir que aquellos gritos no eran otra cosa que una tonta y trillada forma de llamar la atención y así descuidar otros flancos, pero a pesar de que la cárcel es la de más máxima seguridad de la galaxia toda, los policías no son, vamos a decir, los tipos más inteligentes que ha alumbrado este mundo.

Así que Sylvester logra salir a la superficie y ve con pavor que se encuentra en un inmenso transatlántico en medio del puto océano, así que vuelve a su cajón de la penitencia como si esto fuera lo más fácil y rápido del mundo. Cumple su semana de purga y, al regreso a los recreos colectivos, pergeña de la manera más tonta que usted pueda imaginar, el escape, con Schwarzenegger y un árabe más bueno que Laura Ingalls en misa mientras, en tierra firme, Curtis 50 Cents Jackson, presa de un momento de gran fluidez en su intelecto, decide googlear “Encarcelamiento privatizado” + “Fuera de la ley” y le sale en Wikipedia: “La Tumba” (Al final tanto chirimbolo sofisticado y tenías que usar el Google, Curtis ¿Quién escribió esta historia? ¿Mi abuela Mary? ¡Dios!). Así que imagina que su jefe seguro está ahí pero ya es tarde. Sly logró escapar gracias a su pericia y la ayuda de Schwarzenegger y el árabe y termina arribando a las costas de Marruecos luego de hacer explotar por el aire a Hobbes mientras Secretaria y Curtis duermen a D’onofrio, lo meten en un auto y lo encierran en un container con destino a no sé dónde y la película termina con el otrora gran actor dramático gritando como un pelotudo dentro de un container en medio del océano con rumbo incierto.

Diga que quiero mucho a mi primo y que odiaría tener que dejar de comer los tallarines con tuco que hace su madre cuando nos juntamos una vez al año en su casa de Vermont mientras degustamos unos vermouths, que si no, es para pegarle un contundente cachetazo en la frente.


Le pongo 2 Juanpablos, la escena en donde Schwarzenegger, el árabe y él sonríen a la cámara de vigilancia es graciosísima, pero es lo único.

PD: Nunca jamás, durante el transcurso de toda la película, ni Stallone ni Schwarzenegger cargan con esos impactantes fusiles-metralleta que blanden en el póster del film.

viernes, 7 de marzo de 2014

The Counselor (2013)



Estreno de la Semana


Con: Michael Fassbender, Cameron Díaz, Brad Pitt, Javier Bardem, Penélope Cruz, Bruno Ganz, Rosie Pérez, Édgar Ramírez, Rubén Blades, John Leguizamo y gran elenco

Dirección: Riddley Scott


Bien. Genial. Sublime película de Riddley Scott.

Fassbender está irreemplazable, Cameron Díaz encontró la horma de su zapato en responsabilidad que le otorgó Ridley al obsequiarle este increíble rol que tuvo la suerte de componer. Bardem es perfecto, es uno de los actores más completos de esta era. Y Pitt, siempre garpa.

La parte floja, siempre a cargo de Penélope Cruz, no termina de llenarme, pero tampoco desentona tanto, está en el lugar adecuado aunque podría haber sido cualquier otra actriz.

Y no puedo decirles mucho más de The Counselor sin meterme demasiado en la trama, pero es una de esas películas que cuando terminan las pongo de vuelta, y eso no ocurre demasiado por estos días. The Counselor es una máquina de aconsejar, de inundar todo de poéticas metáforas y de describir, con excelso talento, lo que la codicia “es” y no lo que provoca.

Le pongo 9 Juanpablos. Si tuviera plata me compro una copia y la veo una vez por mes.

Gran manual de autoayuda.




jueves, 6 de marzo de 2014

This is the end (2013)






Con: James Franco, Jonah Hill, Seth Rogen, Jay Baruchel, Danny McBride, Craig Robinson, Michael Cera, Emma Watson y muchísimos más célebres que hacen de ellos mismos

Dirección: Evan Goldberg y Seth Rogen

Y así como la película de ayer sobre un supuesto fin del mundo era muy copada, acá tenemos otra opción que no, para nada. Lo lamento por aquellos que amaron esta estúpida atracción fílmica, pero no.

James Franco y Jonah Hill ya están para otra cosa, ya juegan en ligas mundiales y lejos quedó la época en la que hacían de adolescentes pajeros o jóvenes fumones.

No me pasó nada de nada. Me aburrió. Me dio vergüenza ajena. Me dio lástima que tipos que me sorprenden con actuaciones comprometidas como 127 Hours o The Letter en caso de Franco, o Wolf of Wall Street y Cirus hablando de Hill se equivoquen de esta manera y vuelvan el tiempo atrás para protagonizar esta tontería.

Tengo que admitir que hubo tres o cuatro momentitos que estallaron una inevitable carcajada en mi boca, pero la sola participación de Danny McBride, tipo sucio y desagradable si es que hay uno en Hollywood City sumado a las escenas de cocaína y sexo asqueroso de Michael Cera fueron suficientes para dilapidar una película estúpida y necia que muestra con espanto lo al pedo que están las estrellas de Hollywood treintañeras, la cantidad innecesaria de plata que tienen más la cruda realidad de que si no se juntan entre ellos para aburrirse de la forma en que lo hacen, deberían pegarse un tiro en las pelotas.

Y ese flagelo que supuestamente sufren podría haber sido contado de manera más seria y hubiese sido un golazo de media cancha, pero esto es una huevada desfachatada que no deja nada productivo.

Le pongo 2 Juanpablos.




miércoles, 5 de marzo de 2014

The World's End (2013)





Con: Simon Pegg, Nick Frost, Martin Freeman, Paddy Considine, Eddie Marsan, Rosamund Pike, David Bradley, Michael Smiley y gran elenco

Dirección: Edgar Wright


Ya a estas alturas de la vida entrar al video club y encontrar una nueva y reluciente producción cinematográfica co-protagonizada por Pegg y Frost es más que suficiente para agarrarla y volverse rápido a su casa así verla de una vez por todas.

Qué gran dupla resultaron ser estos dos tarados, cómo me hacen reír…

Lamentablemente no puedo decir nada sobre la trama si pretendo no ser cascoteado por una horda de fanáticos Pegg/Frostianos, aunque imagino que si hubiera a esta altura del año un fanático de esos que aún no la haya visto, muy fanático que digamos no es, pero igual, por las dudas, mejor no digo nada.

Lo que sí le digo es que la vea, no va a ser tan gil de perdérsela.

Le pongo 7 Juanpablos




martes, 4 de marzo de 2014

Wakolda (2013)





Con: Álex Brendemühl, Florencia Bado, Diego Peretti, Natalia Oreiro, Elena Roger, Alan Daicz (cuando digo que este chico es el hijo no reconocido de Diego Peretti no estoy equivocado) y gran elenco

Dirección: Lucía Puenzo


Más o menos. Brendemühl está bien, muy bien caracterizado. Muy parecido. Bado acompaña y Oreiro no desentona, que no es poco. Pero no me gusta el mensaje que deja la película. Ojo, quizás sea una sensación mía, pero me parece que pintan a un Menguele talentoso y fascinado con su profesión que, lejos de haber sido como todos escuchamos, en realidad fue un incomprendido de su época que luchaba por encontrar la cura a ciertas enfermedades genéticas. Y no me parece una buena manera de describir su paso por Argentina.

Menguele fue un hijo de mil putas, un sádico enfermo de mierda que tenía vía libre y rienda suelta para elegir al judío que quisiera, meterlo en un laboratorio y experimentar con la libertad de quien tiene a su merced millones de ratas para probar con ellas lo que sea y cómo sea. ¿Cuánto peso soporta una extremidad antes de desmembrarse de su coyuntura?, ¿qué daño produce la ingesta desmedida de lavandina?, ¿cuánto tiempo vive un ser humano, a ciencia cierta, sin dormir, o sin comer, o sin hidratarse?, ¿cuántos martillazos podía soportar un niño en su cabeza antes de volverse loco o morir?, ¿a qué temperatura se congela una persona?, ¿qué dosis de distintos venenos eran mortíferas para el hombre? y demás masacres investigativas que dejaron miles de muertos de las peores maneras, muy por encima de su interés en solucionar problemas congénitos en hermanos gemelos o cómo dejó sentado en una libretita sus avances en materia de estudio a la falta de crecimiento. Y todo lo que verdaderamente causó su paso por este mundo aún no ha sido lo suficientemente contado, ni siquiera en la película Los Niños del Brasil.

Y eso me ocurrió con Wakolda.

Luego, el Llao Llao luqueado antiguo en aquel Bariloche no tan turístico como hoy infestado de nazis y toda la ambientación de época es realmente admirable y hay que quitarse el sombrero. Muy bien lograda en ese aspecto.

Una lástima porque podría haber sido una gran película y se quedó a mitad de camino.

Le pongo 5 Juanpablos