lunes, 14 de noviembre de 2011

Fast 5ive (2011)





Con: Vin Diesel, Paul Walker, Jordana Brewster, Tyrese Gibson, Ludacris, Matt Schulze (gordo como Porcel pero metiendo la panza para adentro como loco), Sung Kang, Gal Gadot, Tego Calderon, Don Omar, Joaquim de Almeida (que juro que pensé que estaba muerto), Elsa Pataky y el innecesario Dwayne Johnson

Dirección: Justin Lin


Como todo el mundo sabe, si es que sigue esta estúpida saga, Domingo va en cana. Finalmente se le termina la joda y debe cumplir una pena de 25 años de prisión sin fianza. Y la película comienza con Domingo Toretto esposado y vestido de naranja fanta, dando pasitos cortos de zombie por las cadenas en sus pies, en tonta fila de 20 reclusos para subirse al colectivo que lo llevará a su nueva morada donde por 25 años no verá ni autos copados ni culos de minas semi en pelotas.

Pero él es Domingo Toretto, y ninguna ley americana lo va a doblegar. Así que sus amigos le aparecen en la ruta desértica por donde viaja encadenado rumbo a prisión escoltándolo por los costados y, haciendo piruetas imposibles con unos autos súper espectaculares, logran hacer trastabillar y dar mil tumbos al colectivo donde viaja Domingo, que va escupiendo presos por las ventanillas hasta detener su loca cabriola.

A pesar de que el bondi da miles de tumbos espectaculares y queda completamente deshilachado, y a pesar de que los 40 presos estaban atados y encadenados de cuello, piernas y muñecas al momento del múltiple vuelco, nadie muere ni sufre amputaciones ahí dentro. Y a pesar de que el lugar donde deciden dar el golpe es el medio de la nada misma, la ley logra recapturar a todos los presos a las pocas horas. Salvo a Toretto, que es declarado en fuga.

Y no se entiende cómo fue que lograron salir del país, ya que toda la pandilla de Toretto tiene estricto pedido de captura y sus caras están impresas hasta en los vasitos plásticos de Mc Donalds, pero la película viaja al Brasil, más precisamente a Río de Janeiro, donde está esa montaña ridícula que parece un kiwi gigante pero que los brasileños llaman “Pan de azúcar”, haciendo que me plantee el siguiente dilema: O los brasileños no conocen el kiwi o le dicen pan de azúcar a esa fruta peluda, ácida y verde, que tiene menos azúcar que vida de Lilita Carrió.

Y Rubio y Flaca llegan primero al Brasil y buscan una dirección en el medio de la Favela más pesada y narco de todas. Él es rubio y está vestido re canchero, y su novia (la hermana de Domingo) está vestida para el infarto. Y a medida que suben la empinada calle de la Favela, las ventanas de las humildes casas van chorreando brasileños violentos por doquier que, con armas largas y automáticas colgadas de los hombros, los miran con ojos de asesinato y violación en masa. Así que rubio decide que lo mejor es volver en otro momento. Justo cuando aparece a los gritos Matt Schulze, retando a los parroquianos, amenazándolos con la mirada como diciendo “Yo mando acá y nadie va a tocar a estos 2 pibes(Y eso es muy ridículo porque uno se pregunta ¿cómo habrá conseguido tanto poder un yanquie de cuarta para ser una especie de líder de una Favela peligrosa en tan corto tiempo?, pero es este mundo en que vivimos, infestado de películas sin fundamento) y los tipos se guardan y los dejan seguir paseando por la Favela.

Luego de esto, el gordo Matt los invita a su nuevo hogar, donde vive con una brasileña mulata de rulos. Porque, según estos elementales yankies, los brasileños deben cumplir a rajatabla con unos rasgos característicos: Deben ser negros, deben tener rulos y deben utilizar una camiseta verdeamarella, de lo contrario no pueden ser señalados como rigurosos brasileños.

Y Gordo y Rubio se siguen teniendo pica desde la vez que en la 1 Rubio le birló a Flaca. Pero se respetan. El tiempo pasó y cada uno rehízo su vida. Gordo los invita a unas cervecitas pelotudas de esas de 300 ml que toman estos insufribles yankies y Flaca se va a la baño a vomitar y cuando se mira al espejo ve en el reflejo que Brasileña la observa con ternura desde la puerta con un crío en brazos y le pregunta si ya le dijo a Rubio (que está embarazada) Y Flaca le dice que no.

Y cervecita va, cervecita viene, de pronto todos escuchan desde adentro de la humilde casa el rugiente motor de un Dodge Charger modelo 69. Por lo que imaginan que finalmente llegó Domingo a disfrutar del Brasil. Y ¿la verdad?, hay que felicitarlo, porque es sorprendente la buena suerte de este tipo: fugarse de una condena de 25 años y desembarcar en Brasil con el dinero suficiente como para rehacer su vida y encima, en una especie de yapa inusitada, conseguir un Dodge Charger exactamente igual al de sus amores… Quiero hacerme amigo de este tipo. Quiero triunfar en la vida.

Entonces se clavan enésimas cervecitas pelotudas mientras sonríen y disfrutan de la cálida noche brasileña cuando de repente Gordo señala que tiene un “trabajo”, que es “fácil” y que solo hay que conseguir 4 brasileños, 3 autos copadísimos y 1 híbrido inexplicable para ir a toda velocidad por el desierto a la par de un tren de carga para asaltarlo y robar de adentro de uno de sus vagones 3 infernales vehículos legendarios.

Y todos aceptan. Incluso Flaca, que está recientemente encinta y no debería tomar responsabilidades de esas siendo que los primeros tres meses de embarazo la mujer debe ser un poco más prudente con los movimientos bruscos o con los levantamientos innecesarios de peso, pero ella es una Toretto, y ningún embarazo le va a impedir andar por ahí meta saltar de acá para allá como un mono tití.

Y consiguen todo. Son muy afortunados en ese aspecto porque brasileños en Brasil hay por doquier, puedo dar fe de eso, pero los autos copadísimos también los consiguen, y el híbrido inexplicable lo construyen en una noche bajo la luz de las estrellas cariocas, cervecita en mano, al compás de algún rap poderoso. Ya estoy empezando a sentir gran admiración por estos flacos. Son muy expeditivos.

Así que todo listo. A robar se ha dicho. Se suben a los 3 autazos conseguidos y viajan a todo trapo al medio de un desierto que no sabía que existiera en las cercanías de Río de Janeiro. Y llegan al lugar en donde los 4 brasileños lo esperan en el híbrido inexplicable y parten todos juntos hacia las vías del tren (y acá me pregunto: ¿para que necesitaban los 3 autos súper copados? Podían ir en cualquier vehículo al lugar de encuentro, un viejo volkswagen escarabajo de esos que hay millones en Brasil les hubiera servido, ¿no?)


En el tren viaja el FBI. Sí. Pasa que los 3 exquisitos autos que transportan están siendo embargados por la AFIP carioca a un poderoso empresario dedicado a la prostitución y a la venta al por mayor de cocaína y afines. Entonces por eso están custodiados por el FBI (¿?). El tren va rápido, rapidísimo, y es medio de carga y medio de pasajeros, pero esto no impide a nuestros inteligentes amiguitos acercarse al ferrocarril saltando como locos en el hibrido inexplicable y cortar con soplete un rectángulo casi perfecto de 4 metros por 2 de alto para retirar los vehículos. Esto también es increíble, porque usted debería ver como salta el híbrido inexplicable y el pulso de estatua que tiene el soldador brasileño que consiguieron para dar el golpe, le sale re-rectangular el rectángulo que se propuso. Un groso el soldador ese.

Mientras tanto, el tren sigue a los pedos y Gordo continúa acelerando el híbrido inexplicable mientras las motas de arbustos lo hace saltar como desquiciado y, en la parte de atrás, los brasileños desenganchan los malacates y Toretto, Rubio y Flaca ya están sentados en los cockpits de los 3 vehículos, que son tomados de a uno de las ruedas y extirpados de un latigazo del vagón para quedar perfectamente estacionados sobre el chapón trasero del híbrido inexplicable para que luego Gordo le incline una rampa con una palanca neumática y entonces sí bajar con cuidado del híbrido y salir a más de 100 por hora marcha atrás por el desierto infestado de ortigas, pequeñas lomitas y arbustos duros como el mármol, todo esto saltando enloquecidos. Y eso también sorprende mucho, porque el híbrido que construyeron tiene unas ruedas muy grandes y es muy alto, casi diría que pasa un petiso caminando tranquilo bajo el chásis. Y los autos que roban son las típicas leyendas de los 70, un Ford GT40, un De Tomaso y otro que no conozco mucho pero todos autos bajísimos, pegados al piso. Es increíble como logran robarlos y escaparse conduciéndolos por ese desierto intransitable. Realmente quiero ser amigo de estos tipos. Son unos genios.

Entonces cuando queda un solo auto por extirpar, aparece el guarda espaldas del poderosísimo empresario brasileño por el vagón agujereado y empieza a los tiros y todo se complica y el FBI, que está en el vagón de adelante, escucha los disparos y uno de ellos pega su cara al vidrio y ve claramente que hay un enorme híbrido inexplicable saltando como loco a la par del tren llevándose los vehículos embargados. El agente del FBI se sorprende mucho ya que hasta el momento de los disparos no se había percatado de lo que estaba ocurriendo frente a sus narices. Igual que yo, que quedé igual de sorprendido porque me imaginé que el FBI estaría varios vagones más adelante pero no, resultó ser que estaban ahí al ladito nomás. Son bastante idiotas generalmente los agentes del FBI, ¿no tienen uno inteligente? 1 solo pido… Siempre llegan tarde o quedan mal parados…Y qué arriesgados son Toretto y su pandilla… Aunque en realidad no los culpo, con agentes del FBI tan timoratos cualquiera con pedido de captura se manda a intentar robar cualquier cosa delante de sus narices.

Así que escapan. En el último segundo viable antes de que el híbrido inexplicable explote como si fuera una bomba Napalm al incrustarse en el parante de un altísimo puente de hierro entre las montañas de Río de Janeiro (tampoco sabía que Río tenía montañas tipo las de la cordillera) y ellos caen por el precipicio junto con el tercer auto otrora embargado por el FBI.

El precipicio, como todo precipicio, es muy pricipicioso. Pero quédese tranquilo, los muchachos no se hacen nada. Logran sacar sus cabezas de debajo del agua y tomar una fuerte bocanada de carioca aire fresco y todos nos alegramos ya que, de haber muerto como deberían, la película hubiera terminado en el minuto 14, pero no, están a salvo.

A pesar que el lugar en donde cayeron es inhabitable, inaccesible e inabordable, a orillas del virgen lago que les amortiguó la kilométrica caída ya los están esperando apuntándolos con armas largas varios esbirros de Poderoso Narco, que debe haber sabido de antemano no solo que le robarían los 3 vehículos que ya le había embargado el FBI sino que, aparte, sabía puntillosamente donde caerían en el caso que tuvieran un terrible accidente. A veces pienso que soy muy pelotudo y que los poderosos están donde están precisamente por estar en esos puntillosos detalles que a mí se me pasan por alto.


Entonces los agarran y los atan de manos colgando en un galpón abandonado y les ponen un plástico en el piso para amedrentarlos con que mataránlos sin piedad. Pero Rubio y Toretto se la re bancan. Y se hacen bien los pelotudos.

Poderosísimo Narco está muy enojado y ansioso por recuperar el Ford GT40. Nadie entiende por qué, ya que con la plata que tiene podría comprarse uno por día hasta acapararlos todos, pero se ve que hay algo más que ellos no saben. Y no van a descansar hasta descubrirlo. Así es que Narco se va del recinto haciéndose el malo y da la orden que los corten en cubitos y los sazonen con un poco de nuez moscada. Pero esto no ocurre, ya que Toretto logra zafar de las cadenas que le atan las muñecas y comienza a las patadas y a las trompadas para luego liberar a Rubio y salir como cabaret en quiebra: Echando putas.

Y vuelven a la casa de Gordo y discuten con éste, diciéndole que cómo los involucró en un robo a Poderoso Narco, que ahora cómo iban a hacer. Y pelean y Toretto lo echa. Y Gordo se va, como siempre.

Entonces comienzan a buscar el porqué del nerviosismo del Narco y resulta que el GT40 tiene un reproductor de DVD que en realidad es como una especie de GPS tipo agenda en donde están detalladas con lujo de detalles todas las entregas de merca, todos los viajes llevando dinero de un lugar a otro y todas las entradas a la jefatura policial que hubo en el último año. Y esto es sorprendente porque ¿qué hizo que un poderoso narco utilice un auto tan vistoso para transportar gran cantidad de merca y grandes cantidades de dinero en efectivo e ir a visitar repetidas veces al director de la jefatura policial y encima tener todo registradísimo en un GPS conectado en el tablero del auto? Increíble.

Y Toretto, al saber que tiene a Narco agarrado de las pelotas, hace esa sonrisa torcida que acostumbra y retira el chip del tablero y se lo guarda en el bolsillo en el momento justo en que ingresan por la fuerza en el galpón un centenar de esbirros muy mal copados que comienzan a recagarlos a tiros de ametralladora. Por lo que Toretto, Rubio y Flaca (que está embarazada de semanas) salen a los saltos rompiendo un gran ventanal y cayendo varios metros sobre un techo de chapa, incluso Flaca, que está embarazada de pocas semanas poniendo en peligro su gestación.

Pero no logran escapar. Los esbirros son muy temerarios y muy de saltar por los techos también. Así que deciden seguir bajando la Favella a fuerza de saltar de techo de chapa en techo de chapa, incluso Flaca, que está embarazada de pocas semanas poniendo en peligro su gestación, para también romper más ventanales y hacer boquetes en techos no tan rigídos para caer como bolsa de papas dentro de algún humilde hogar, incluso Flaca, que está embarazada de pocas semanas poniendo en peligro su gestación, mientras los esbirros están cada vez más cerca y continúan disparando miles de tiros y ellos siguen escapando meta saltar de una casa a la otra cayendo peligrosos metros abajo, incluso Flaca, que está embarazada de pocas semanas poniendo en peligro su gestación.

Y a los esbirros se les suma Dawyne Johnson, que es mandado directamente del corazón mismo de Norteamérica para atrapar a Toretto de una vez, ya que es el más indicado por sus terribles músculos y su barba candado. Así que todo mal para Toretto y su pandilla, que siguen saltando y golpeándose y rasguñándose peligrosamente, incluso Flaca, que está embarazada de pocas semanas poniendo en peligro su gestación. Y terminan en una gran cloaca que desemboca en un arroyito y Toretto decide que lo mejor es que se separen, pero Flaca no quiere y termina confesando su secreto, haciendo que Rubio la abrace y le proteja la panza, esa panza que acaba de bajar a los tumbos varios cientos de metros de techos oxidados de hogares humildes, y ante la mirada del tío Domingo, que se acerca y los abraza a ambos y decide que continúen juntos porque volvieron a ser una gran familia.

Y deciden vengarse de Poderosísimo Narco (¿vengarse de qué?) Domingo tiene un plan, va a llamar a todos sus amigos y juntos van a robarle a Narco más de 120 millones de dólares en efectivo. El tema es así, resulta que Narco tiene un montón de galpones en donde fabrica cocaína con mujeres desnudas y esbirros controladores, y por algún motivo extraño, en cada una de esas propiedades también hay alrededor de 10 palos verdes en efectivo y al alcance de la mano metidos en un changuito del Coto. Entonces llegan al primer lugar, cagan a trompadas a todo el mundo y les prenden fuego los 10 palos y le dicen al mandamás de los esbirros que le diga a Narco que le va a pasar lo mismo con los otros 110 palos.

Así que Narco se enoja y mata al pobre esbirro robado de un castañazo en la jeta con una piedra muy linda que tiene en su escritorio y decide llevarse toda la guita adentro del corazón de la manzana en donde está enclavada la jefatura policial.

Pero esto no es impedimento para nuestros rápidos y furiosos amiguitos. Ellos ya consiguieron a sus amigos, ya consiguieron un galpón muy parecido en tamaño a la jefatura policial, ya consiguieron montones de equipos y cámaras y macs y cronómetros, ya consiguieron un “abridor experto” de cajas fuertes y ya metieron de queruza una caja de cartón dentro del recinto en donde se encuentra la caja fuerte con los 110 palos en donde hay oculto un autito robótico con una camarita. Así que de inmediato sacan el autito y filman el lugar y reconocen la caja fuerte, que es un cubo metálico de 2 metros de lado que pesa unas 10 toneladas que tiene una puerta que se abre solo si Poderosísimo Narco pone su mano entera en un escáner al lado de la exclusa de apertura de la bóveda. Y de inmediato consiguen (esto es lo más sorprendente), una caja fuerte exactamente igual que compran aparentemente en ebay y Negro Abridor comienza a hacer diversas pruebas de apertura mientras los demás se turnan para dar una vuelta tipo pole-position alrededor del galpón para determinar si las cámaras lograrán enganchar el auto. Y siempre les faltan 5 para el peso. Por un pelito no logran dar la vuelta. Y encima Negro Abridor se da cuenta que sin las huellas digitales de Narco no podrán abrir jamás la caja fuerte.

Así que deciden mandar a una de las chicas a coquetear con Narco, que está custodiadísimo en una playa pero los guarda espaldas la dejan pasar por más que no la conozcan y Narco aprovecha y le toca el culo y ella se vuelve con las huellas digitales en sus nalgas. Punto N° 1: Resuelto.

Y como no logran dar la vuelta rápida deciden que lo mejor es chorearse 4 autos de la policía carioca. Y van y se los roban y nadie los agarra ni les dice nada.

Y dan el golpe en los autos de policía mientras Toretto y Rubio aparecen con 2 autos negros preparados a los que les adosan unas cadenas al paragolpe trasero y no solo logran arrancar las 10 toneladas de caja fuerte de la pared donde está amurada sino que comienzan una larguísima persecución por las calles de Río de Janeiro con las 10 toneladas de caja fuerte saltando y flameando detrás de sus paragolpes destruyendo toda la ciudad pero sin aflojar siquiera el paragolpes trasero de los 2 autos negros que utilizaron para tal fin. Lamentablemente no me quedó clara la marca de estos bólidos, pero habría que tomar nota de esto ya que tienen paragolpes muy reforzados.

Y mientras escapan de los esbirros y del siempre llegado tarde Dawyne Johnson, se topan con un larguísimo puente tipo el de Miami en donde vuelven a mostrar sus eximias cualidades de conductor perfecto y vuelven a dejar a todos con el culo en la mano destrozando por completo varias decenas de autos.

Y listo. Todos muertos y todo Río de Janeiro destrozado.

Toretto y Rubio se bajan de los vehículos y miran con nostalgia todo el zafarrancho que hicieron y aparece en escena Dawyne Johnson, que les perdona la vida porque Narco le mató en una confusión a todo su equipo y entonces están a mano (¿?) Pero el dinero se queda ahí (¿?¿?).

Toretto y Rubio sonríen y aceptan el trato y se las toman.

Dwayne Johnson espera que se alejen y abre la compuerta de la caja fuerte (que mágicamente está abierta) y adentro no hay nada. Porque en realidad en un momento en que se metieron en un túnel (estaba todo arreglado) otros amigos venían con la caja fuerte comprada en ebay y la intercambiaron.

Y la película termina con Toretto y su pandilla repartiéndose entre 10 y 12 palos per cápita, haciendo doblemente millonario a Rubio, ya que le toca por 2 porque su mujer colabora en el intríngulis. Y todos se compran autos súper copados y son felices y tienen tanto dinero que no lo pueden creer y viven a orillas del mar.

Y hay una última escena. En donde Dwayne Johnson está escribiendo su reporte en su oficina (¿cómo explicará que los dejó ir?) y se acerca su secretaria, que es Eva Méndez (¿?¿?¿?), con unas fotografías tomadas a un asalto en Bélgica en donde estuvo involucrada una joven pistera. Y Dawyne le dice, enojado y sin mirarla, que no le interesa. Que si no le trae novedades de Toretto y su pandilla no le importa (¿?¿?¿?¿?).

Y Eva Méndez le abre el legajo y le muestra la foto que tomó una cámara de seguridad que muestra a Leti (la novia de Toretto muerta en la 4) vivita y coleando haciendo de las suyas. Por lo que lamentablemente habrá una 6 y una 7 y una 8 y una 9 e incluso una 10 de esta película desesperante que chorrea grasa yankie por todos lados.

No le pongo ningún Juanpablo

Me gustaría ponerle una piña a Vin Diesel, por qué negarlo.

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