Con: Aaron Eckhart, Liana
Liberato, Olga
Kurylenko y gran elenco
Dirección: Philipp Stölzl
Hollywood debería haber
sido exprimidor de naranjas en lugar de ciudad donde se producen atracciones
fílmicas, porque es terrible como le sacan jugo a las historias que logran
captar la atención de las ovejas que consumimos lo que ellos eligen contarnos.
¿Funciona padre que sabe
pelear rescatando hija adolescente? Listo: A facturar.
A pesar de esto es
interesante y entretenida. Liberato va bien y Kurylenko sigue estando más buena
que comer pollo con la mano. Y Eckhart va bien, con ese hoyuelo hecho con un
cincel en el medio exacto de su norteamericana pera de superhéroe (¿cómo no se
les ocurrió aún? Vamos que no hay pera como la de Eckhart para construir un buen superhéroe… No se duerman muchachos), consigue escapar, revertir la relación
con su hija mientras escapa y golpearse con asesinos llevándonos por toda la
historia con destreza de poeta cursi.
Así que véala. Eso sí,
tenga cuidado que esta película fue construida en un brainstorm luego de ver
las cifras recaudadas con Taken y Taken II, pero qué le vamos a hacer. Hay
cosas que ya deberíamos aceptarlas como son y no darles tantas vueltas.
Le pongo 5 Juanpablos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario