Con: Denzel Washington, Chris Pine, Rosario Dawson y Kevin Dunn.
Dirección: Tony Scott.
La alquilé para matarla. Denzel Washington no puede aceptar 2 roles casi en el mismo año para películas sobre trenes y me dije: Si la del subte con Travolta fue tan pero tan mala esta deber ser una porquería inusitada, la alquilo y la mato.
Y me cagó. Me cagaron todos. No está mal. Tampoco es “Dr. Strangelove” de Stanley Kubrick, no me malinterprete. Está bien, muy bien logradas las actuaciones de todos. El negro compone un gran maquinista a punto de jubilarse, Pine hace un respetable papel de maquinista a punto de reemplazar al jubilado, y Rosario Dawson (que sigue estando más buena que el pan mojado en juguito de carne asada) hace un justo y estudiado rol de jefa de ambos.
La película muestra, de manera un poco exagerada, una historia real ocurrida en 2001 en EEUU en donde un tren estuvo “a la deriva y a gran velocidad” llevando porquerías tóxicas, y dos maquinistas lograron frenarlo enganchándolo de atrás arriesgando sus vidas mientras la compañía intentaba pararlo con maneras mucho más peligrosas sin importarle un carajo de los ciudadanos que serían víctimas de la catástrofe, como corresponde a cualquier corporación estadounidense.
No está nada mal.
Le pongo 7 Juanpablos sin duda alguna.
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