Shaun of
The Dead (2004)
Con: Simon Pegg, Nick Frost, Kate Ashfield, Lucy Davis, Dylan Moran, Bill Nighy, Matt Lucas y gran elenco
Dirección: Edgar Wright
Cuando dos tarados
mentales como Pegg y Frost se encuentran en la vida y se mimetizan de esa
manera se generan duplas irreemplazables que dejan una huella difícil de borrar.
Y
Shaun of the Dead es quizás el punto máximo de unión-talento exprimido de estos
dos ingleses que tan bien me caen.
La
escena inicial de Pegg yendo al súper del barrio y no notando para nada lo que
ocurrió con su ciudad a pesar de que los zombies se le acercan y un ciudadano
le pasa corriendo por al lado escapando desesperado, más el momento en que incluso
abre la heladera para sacar una coca y no advierte el vidrio con sangre sumado
a la ridícula patinada en dudoso charco de flujos corporales y su completa y
absoluta apatía de lunes por la mañana que no lo deja entender lo que pasa a su alrededor fue
sin dudas la mejor pegada y la más atrayente manera de arrancar una película de
zombies distinta que no deja de sorprender escena tras escena y hoy, casi 10
años después, sigue generando la misma simpatía en quienes la ven, a pesar de
saber de qué va la cosa.
Desde
cómo avista el siguiente paso a dar con el grupo de "sanos" subiéndose a un muy
infantil tobogán hasta la genialidad hasta ese momento nunca advertida: que lo
mejor que hay en el caso de que hubiese que atravesar una avenida infestada de
zombies es precisamente ¡hacerse el zombie! es suficiente para recomendar esta
pelotudez genial que tanta risa dio en su momento y que aún hoy sigue siendo
una película cómica de esas que no hay que olvidarse de ver.
Así
que va esta Recomendación Vetusta para Shaun of the Dead con toda la onda y
el piripipí a una película que marcó una nueva forma sobre cómo seguir exprimiendo
la naranja de los muertos vivos, que ya bastante seca estaba. Y eso es más que
meritorio para ingresar en este segmento por la puerta grande.
Le
pongo cientos de Juanpablos.
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